VALÈNCIA. El Levante más plano de la temporada. Javi Calleja habló en sala de prensa de "limpiar cabezas" y la realidad es que, de un día para otro, su equipo ha pasado de cuajar el mejor partido del curso a convertirse en el más preocupante. Como si esas mentes continuaran patas arriba desde que el 2023 llegó al calendario. El marcado plan del Ibiza pronto invitó a imaginar una noche dura, pero no ganarla era impensable con los regalos de los rivales en las manos, con el lazo por abrir. Eso sí, no amasar tres puntos empezó a tener sentido cuando la llanura en las ideas granotas fue fermentando con el paso de los minutos. Todavía antes, incluso, de que el Ciutat se convirtiera en un manojo de nervios. Se mascó la pesadilla. Estas son las notas de Plaza Deportiva del Levante - Ibiza:
Femenías (-): El balear apenas apareció en el partido. No hizo falta. El Ibiza no exigió y apenas vio el color de su camiseta. Solo en un intento de chilena que Femenías blocó sin problemas en el primer acto.
Pubill (6): Físico. El de Manresa expuso una superioridad física evidente en el flanco diestro. En el primer tiempo, sobre todo, mostró potencia en duelos ante Grima. Se fue desgastando. La pizarra de Calleja le relegó al banquillo pasada la hora de juego para dar toda la banda derecha a De Frutos.
Postigo (5): Poco exigido. Complicado valorar defensivamente a los centrales del Levante. Poco exigido en labores puramente traseras, el partido Postigo de basó en las vigilancias y la salida de balón que, por lo general, pasó por las botas de Pier. El capitán, una vez finalizado el encuentro, fue al careo con la grada de animación, que le despidió al son de "¡Estamos hasta los huevos!".
Póber Pier (6): Algo más exigido. El gallego sí que tuvo que sofocar algún fuego fruto del avance de líneas del Levante y el intento de caza de contras del Ibiza, con un plan de partido muy marcado. En alguna ocasión del segundo tiempo pudo correr Cristian Herrera y ahí Pier ganó duelos. Bien. Un dato que deja a las claras el juego del Ibiza: Róber Pier fue el jugador de la cita con mayor número de pases precisos (el 93%).
Álex Muñoz (5): Sólido. Sin un trabajo especial a la hora de sostener a Coke, al alicantino se le echó de menos en ataque. En los momentos de mayor libertad en ataque, pocos centros del 'doctor' acabaron en buen puerto. Calleja renunció a introducir a Saracchi, que ni siquiera calentó, y la pierna izquierda de Álex acabó el partido.
Pepelu (6,5): Bien. Probablemente, de nuevo, el mejor del Levante. Llegó a desesperar y acabó solo en el pivote, ya con Iborra lanzado al ataque. El que más robó del cuadro de Calleja, con nueve recuperaciones.
Iborra (5): Le hace falta al Levante. Del pivote a adelantar líneas y buscar el juego directo. Iborra pasó por diferentes fases durante el partido sin impregnar su sello. La intensidad no se negocia en el moncandense y no fue, ni mucho menos, el quiste del equipo de Calleja, pero el equipo echa de menos al mejor '10'.
Montiel (6,5): De dulce. Saltó al campo como si fuese una prolongación de la última tarde ante el Alavés. Tras cumplir ciclo de amonestaciones, el madrileño se demostró clave. Juguetón y nexo en ambos costados.
Rober Ibáñez (5,5): Tocado. Se agotó. Con una visible venda en su pierna derecha, empezó muy móvil en banda izquierda pero se fue apagando. Sustuitdo por De Frutos.
Soldado (4): Errático. Fue titular, pero mantiene su línea en una temporada nefasta. Volvió a fallar una ocasión clara en un mano a mano con Germán, aunque fue una acción invalidada por fuera de juego... Y desapareció. Se marchó silbado por el Ciutat. El quiste del Levante de Calleja reside en la ofensiva y el partido de Soldado refleja tal apatía.
Wesley (5): Pívot. No busquen demasiado al brasileño donde se emplatan los goles. Si lo quieren encontrar, casi siempre allá donde se cocinan. Bien de espaldas, pero sin efecto de cara a portería. Él solo se labró una ocasión en que bailó como si de un pívot de baloncesto se tratara: trasero sobre Martín, reverso y lanzamiento... que fue detenido por Germán Parreño. Otro hightlight más para la colección de citas a años luz del gol.
De Frutos (4): Palo de Calleja. El segoviano no está en su mejor momento. Es una realidad palpable desde que Javi Calleja le deja fuera del once inicial seis meses después hasta que es la primera carta para resolver el partido. No surtió efecto, ni por izquierda ni por derecha. Calleja admitió que no se notó su entrada.
Musonda (5): Raspando. Ni la entrada de De Frutos ni la de Musonda. El belga aprueba raspado un encuentro en que no le salió absolutamente nada pero al menos tiró de un reducto de rebeldía.
Cantero (4): Mal. Salió y la primera pelota que tocó fue para mandarla al tendido sin detenerse un segundo para pensar en su posición de disparo: escoradísimo y prácticamente sin oportunidad de sorprender. Ansioso desde el minuto uno. Suspenso.
Bouldini (4): No levanta cabeza. Lo del marroquí va camino de no tener remedio. Cierto es que, como Cantero, tuvo solo 20 minutos para destacascar un partido que el Ibiza ya había embozado sin remedio. Al menos Bouldini no lo fue. Si tocó algún balón, fue intrascendente.