Lo de Wesley es de película

VALÈNCIA. De película. Como si su papel estuviese escrito por un guionista de Hollywood, Wesley Moraes asumió la responsabilidad del penalti para sorpresa de todos. Alucinó el Ciutat -que volvió a vitorearle antes de la tragicomedia-, se sorprendió Campaña y, sobre todo, quedó pasmado Javi Calleja. El técnico reconoció en sala de prensa no entender cómo el brasileño lanzó una pena máxima tan importante en una final perdida, y no Campaña o Soldado, habituales y certeros responsables a los once metros esta temporada.

Pero lo hizo. Wesley ejecutó a la perfección los renglones que alguien le había redactado para su cameo: lo falló. Estrelló el balón en el travesaño para disgusto del director de cine que, en este caso, se sienta en la silla del banquillo granota. No era ese el plan. Tampoco que el drama tuviera, por un momento, un toque romántico. Porque el carioca se levantó y, sin cuajar un mal partido, anotó el empate no definitivo. Al final, papel de película... mojado. Estas son las notas de Plaza Deportiva tras el Levante - Mirandés:

Femenías (6): Nervioso. Inició el partido con dos acciones de dudas en el juego de pies. Raúl García estuvo a punto de adelantar su tanto en un intento de envío largo del meta balear. Poco pudo hacer en los dos goles del Mirandés, pero protagonizó una parada de mérito en el segundo tiempo. Su figura no salió reforzada.

Pubill (5): Exigido. En ataque y en defensa, partido físico del catalán. Salió renqueante.

Róber Pier (4): Demasiado espacio. No estuvo bien en el gol de Raúl García. Su presión fue demasiado laxa, dejó pensar al delantero catalán, que ingresaba peligrosamente en el área y dificultaba cualquier intento de falta del central. Del 'coitus interruptus' de Eibar -gran partido aliñado con fallo garrafal- a una actuación mejorable ante el Mirandés. Tampoco anduvo fino en el recurso y el despeje en el segundo.

Álex Muñoz (5): Suficiente. Errático en las acciones puntuales, mal defendidas en cadena, el alicantino no vive precisamente el mejor momento de la temporada.

Son (6): Ocasiones. Esta vez Son jugó más suelto en el carril zurdo. Acaparó dos ocasiones inmejorables como si de un extremo a pierna cambiada se tratase, pero en ambas se topó con Herrera.

Pepelu (6): Bien. Sostén en el centro del campo, el dianense estuvo bien. Pudo ver puerta por enésima en el curso, pero desde demasiado lejos. 

Campaña (5): Desaparecido. El sevillano desapareció incluso para la tarea que está bordando esta temporada: el lanzamiento desde el punto de penalti. Cabreo de Calleja, general y con el '24', por no asumir él la responsabilidad.

Joni Montiel (5): Poco. Calleja lo sacrificó al descanso para introducir un delantero más. Se marchó sin pena ni gloria.

Musonda (5,5): Algo de chispa. El belga estuvo activo en el primer tiempo. Incluso protagonizó una jugada de mérito, marchándose de tres rivales y levantando al Ciutat. Se diluyó. Calleja lo quitó al descanso.

De Frutos (6): Peligro a cuentagotas. El segoviano fue de lo más peligroso, como casi siempre. Pudo empatar a dos en una última jugada maradoniana. La realidad es que su electricidad habitual estuvo sostenida por un rival ordenado.

Bouldini (4): Sigue igual. Su divorcio con el gol no cesa. Desaparecido, además, y en el camino a los dos meses sin anotar. Esta semana acaba el lastre deportivo del Ramadán para él.

Wesley (5): De película. La de cal y la de arena. Lo del brasileño fue digno del guion de una película de Hollywood desde que decide lanzar el penalti motu proprio, hasta que, después, hace el gol del empate. Calleja no entendió cómo lanzó el penalti por delante de Campaña, pero lo lanzó. Y lo falló. Más allá de la anécdota, se vio un Wesley mejorado en el juego y que se repuso del error.

Soldado (5): La tuvo. Nada más arrancar el segundo acto, tuvo una clara para empatar. Activo.

Cantero (6): Eléctrico. Se ahogó en ocasiones, pero también generó. Pudo ver puerta en una lanzamiento con rosca que besó el palo.

Iborra (5): Suficiente. Sin demasiado tiempo para dejar su sello en el partido, aportó empaque al centro del campo en momentos ya de esquizofrenia.

Rober Ibáñez (6): Activo. Fruto de una conexión suya con Cantero, surgió el gol del empate de Wesley. Eso sí, acabó desquiciado.