VALÈNCIA. Hace casi dos meses que Raquel Tamarit llegó a la conselleria de Cultura. El conseller Vicent Marzà fichó a la profesora y exalcaldesa de Sueca para ocupar la secretaría autonómica de Cultura y Deporte en esta nueva legislatura, una nueva cara en una maquinaria que se mantiene prácticamente intacta. La de Compromís se convertía así en uno de los principales actores de la gestión cultural valenciana, un aterrizaje que viene con una mochila de 'deberes'. En esta segunda parte del año deberá solventar la situación de inestabilidad de Cinema Jove, avanzar en las transferencias de la Diputación o calmar las aguas con el sector de las artes escénicas, que se ha mostrado muy crítico con el equipo de gobierno. Precisamente estos últimos han marcado las primeras semanas de actividad de Tamarit, que se reunió esta semana con representantes de la Asociación Valenciana de Empresas de Teatro y Circo (AVETID), entidad que emitió un duro comunicado en el que criticaba que no se hubiera generado una conselleria de Cultura independiente de Educación o, según el documento, la falta de cargos "conocedores" del sector en la administración. Hablamos con Raquel Tamarit.
-¿Cómo digiere el comunicado de AVETID?
-Una de las cosas que tengo muy claras es que puedes pedir paciencia cuando acabas de entrar. En mi caso, yo acabo de entrar, pero ni Compromís acaba de entrar en el gobierno ni mi conseller en nuevo. Entiendo su inquietud. En este sentido, en el seminario [de gobierno] que tuvo lugar en Montanejos uno de los acuerdos fue sacar la modificación de las bases de las ayudas. Soy capaz de entender que esperan muchas cosas. También en el comunicado se dejaba caer que valoran positivamente muchas cosas que se habían hecho, pero habían pasado cuatro años y con eso no tenían suficiente. En la conselleria y desde esta secretaría autonómica nos tenemos que poner las pilas y en este primer semestre se ha de ver algún cambio.
-Además de la modificación en el sistema de ayudas, ¿se refiere a alguna otra cuestión que se vaya a llevar a cabo a corto plazo?
-A corto plazo no sé decir. A veces tienes toda la voluntad del mundo y chocas con determinadas barreras en la administración. Hay una cosa muy importante: a la hora de contratar, cuando hablas del sector artístico y cultural, no se puede aplicar los mismo criterios. Pongo el ejemplo del Cor de la Generalitat. Una persona del Cor había estado de baja y, por tanto, habíamos pedido la autorización para sustituirla. Después llega el alta de la otra persona, pero, ¿cómo va a cantar una persona que no ha ensayado y no conoce el repertorio? Esas particularidades hay que tenerlas en cuenta.
-El caso del Cor de la Generalitat es muy específico, está pendiente de regularizar su situación.
-Tengo pendiente una reunión con la gente del IVC y con los sindicatos. En septiembre nos sentaremos con ellos para ver qué podemos hacer, pero me consta que es uno de los temas más espinosos del IVC. De hecho, hubo una convocatoria de huelga, se consiguió paralizar... hay muchas cosas que tocar.
-En su primera rueda de prensa habló de la necesidad de "flexibilizar" la contratación de personal, dijo que hay cuestiones que "rozan a veces el absurdo y más en un ámbito tan específico como es la cultura". Identificado el problema, ¿cuál es la solución que se dibuja desde conselleria?
-Se debería dibujar porque si no caemos cada vez en el absurdo. En este sentido nos hemos reunido con todas las patas que dependen de esta secretaría autonómica -el IVAM, Les Arts, el Consorci de Museus y el Institut Valencià de Cultura (IVC)- para ver cómo podíamos agilizarlo entre todos, porque hay necesidades de personal que son comunes. Cuando pides un técnico en iluminación, quizá el que sirve para el IVC puede servir para Les Arts. Estuvimos hablando de unificar para no hacer el mismo esfuerzo muchas veces. [Se trata de] conveniar las bolsas para que tanto museos o Les Arts se puedan dedicar a lo que se tienen que dedicar.
-¿Está calendarizada esta cuestión? Quizá algunos de estos centros se pregunten por qué en estos cuatro años no se ha llegado a este punto.
-En esta vida todo es caminar. En la legislatura pasada se sentaron las bases de muchas cosas. ¿Calendarizar? Ahora tenemos en la secretaría autonómica las necesidades y las autorizaciones de bolsas que se han pedido por parte de cada uno, en qué estado están. Lo tenemos nosotros y el resto de 'patas' del sector cultural público. En este camino es en el que se debe ir trabajando. También está prevista una reunión en Hacienda para aclarar todas estas cosas, porque no depende estrictamente de nosotros.
"Yo vengo del mundo municipal pero para disfrutar de la lectura no hace falta que seas editor o escritor"
-En el comunicado de AVETID, que llegaba pocos días después de su nombramiento, dicen que en la conselleria no hay gente preparada, apuntan a la ausencia de "cargos conocedores de las problemáticas del sector", ¿cómo digiere esta crítica?
-Esto es una secretaría autonómica de Cultura y Deporte y, dentro de cultura, está patrimonio, libros, museos, música, escénicas y audiovisual. Entiendo que ellos habrían querido que hubiera una persona del sector, pero yo hago una reflexión en voz alta y sin ánimo de acritud. La persona que está al cargo tiene cuatro años más dos de incompatibilidad, ¿una persona del sector en activo está dispuesta a renunciar en un momento dulce de su carrera? Yo vengo del mundo municipal pero para disfrutar de la lectura no hace falta que seas editor o escritor. Evidentemente quien entiende disfruta más, pero para eso hay aquí un equipo de gente potente. La idea de esta conselleria es, en lugar de nombrar de asesores a cualquier persona, que sea alguien que me asesore en ese punto.