VALÈNCIA. Qué manera de tirar la primera parte y el partido contra el Barça. Lo dijo Xavi (que sabe mucho de fútbol), 8 contra 6 y balones a la espalda. Eso hizo el Barça, mientras el Valencia miraba jugar a Busquets libre de marca y aprovechaba la velocidad de Aubameyang para que nos fusilara. Tres goles como tres soles. Fueron incapaces los nuestros de reclamar auxilio, perdidos los dos puntas tanto Guedes como Hugo Duro, en carreras estériles que hacían imposible robar un balón y la posibilidad de armar un contragolpe rápido.
Todo ello sumado a la lentitud de Alderete y al despropósito de una línea medular dónde Guillamón lleva varios partidos desconectado y dónde Soler se pierde en funciones defensivas o Ilaix que no ofrece ninguna variante ofensiva.
Así que el equipo no funciona. 0-3 sin lanzar un córner, a pesar de la lucha de Bryan y la desesperación de Guedes en llegar a algún balón. Un hecho milagroso con la calidad que tiene el Barça y la superioridad en el planteamiento. Total un 0-3 y calentitos de morro. Un equipo desarbolado, mal colocado y corriendo detrás de la pelota como alma en pena. Ese no es el juego del equipo ni mucho menos. Con todo perdido el Valencia reacciona, se la juega en el uno contra uno que debió hacerlo desde el principio y crear ocasiones de gol. De cero córners pasamos a lanzar 8, de cero remates pasamos a marcar un gol, vimos parar a Ter Stegen, driblar a Bryan, correr a Guedes, rodear al Barça y ver a Soler rematar tres veces. Cierto es que el cuarto gol de los azulgranas de rebote te manda a los infiernos. También es cierto que el Valencia si quiere crear ocasiones, tiene que jugar por fuera, donde los extremos Bryan y Guedes puedan centrar con la ayuda de Gayà o el propio Soler que cuando ataca el equipo se convierte en otro jugador casi brillante y capaz de decidir en cualquier momento.
Por lo tanto... ¿estamos jugando en arreglo a nuestras posibilidades o realmente estamos jugando a merced de lo que decida el contrario? ¿Somos tan flojos como para que nos marquen tantos goles o por el contrario la falta de un mejor sistema impide que tengamos mejores resultados?
Eso lo tiene que pensar Bordalás. A lo mejor Racic es necesario en la medular y a lo mejor Ilaix y Soler deberán tener capacidad para atacar más y defender menos. Quizás con dos de los mejores extremos de LaLiga hemos de jugar por fuera. Parece que por dentro no es lo nuestro. Maxi Gómez, Duro y M. André (inédito en la película) que sean los que vayan a rematar. Dicen que correr es de cobardes. Pues que corran los que deben y jueguen a fútbol los que saben. Tal vez tengamos mejores resultados.
Eso de que el Valencia ataque solo cuando va perdiendo ya cabrea un poco. Y cuando está casi todo perdido, lanzamos las naves al ataque y solemos hacer daño. Cada rival es diferente, pero si a equipos superiores a ti les dejas el balón y superioridad numérica lo normal es que te desgasten. También es cierto que no tienes centrales con velocidad, excepción hecha de Mouctar, que al final está dando un buen rendimiento.
A esperar, pues, con depresión los acontecimientos. Mallorca es otra piedra angular, no solo para respirar tranquilos, sino para mirar a metas más altas con lógica y sentido común. Me niego y reniego a hablar de la Copa que, por lo visto, nos hace más mal que bien. Ya llegará. Pero falta un sendero por recorrer y desde el partido de San Mamés no lo hemos enfocado muy bien, que digamos.
Vamos a ver si entre Bordalás y los jugadores son capaces aún de darnos una alegría de vez en cuando. Que tampoco es pedirles mucho.