El capitán del Valencia, Dani Parejo, ha alcanzado doscientos partidos de Liga con el club de Mestalla, en el que se ha convertido en líder del equipo al atravesar su mejor momento desde su llegada a la entidad
VALÈNCIA. El capitán del Valencia, Dani Parejo, ha alcanzado doscientos partidos de Liga con el club de Mestalla, en el que se ha convertido en líder del equipo al atravesar su mejor momento desde su llegada a la entidad y sin dejar de mirar de reojo a la selección, en la que le ilusionaría jugar.
Dani Parejo (Coslada Madrid 1989) llegó al Valencia al principio de la temporada 2011-2012, por lo que cumple su séptima campaña en la entidad en una etapa excelente de forma y resultados tras haber vivido situaciones complicadas con anterioridad, tanto por la falta de confianza de algunos técnicos como por del propio jugador.
El jugador es hombre de confianza del técnico Marcelino García Toral, titular imprescindible en sus alineaciones, ya que solo se ha perdido dos encuentros por sanción, y motor del Valencia en la creación del juego como consecuencia de su capacidad para hacer mover el balón desde su posición por delante de la defensa.
Arropado en la medular por futbolistas de contención como Geoffrey Kondogbia o Francis Coquelin, Parejo da la sensación de sentirse siempre cómodo sobre el terreno de juego y consigue que durante buena parte de los partidos se juegue al ritmo que es capaz de imponer.
A estas alturas de la temporada, con el Valencia como aspirante a alcanzar la próxima Liga de Campeones, los objetivos del jugador, tal y como ha afirmado tras cumplir sus primeros doscientos partidos de Liga en Valencia, son "trabajar, mejorar, ayudar, ganar y crecer" para lo que tiene todavía dos años más de contrato.
Es un discurso diferente al de otras fases de su paso por el club con algún incidente extradeportivo y con el conflicto suscitado en el verano de 2016 cuando Pako Ayestarán no contó el jugador en un momento en el que estuvo muy cerca su salida del club para firmar por el Sevilla.
Previamente, el exjugador de Queens Park Rangers, Real Madrid y Getafe, había tenido continuidad con sus diferentes entrenadores, con la excepción del primer año, con Unai Emery en el banquillo.
Tras los problemas de hace dos veranos, la situación cambió con la llegada de Salvador González "Voro" al banquillo, quien confió en Parejo para salvar al equipo de una situación clasificatoria complicada. El futbolista respondió.
El verano de 2017 fue intenso en Valencia en cuanto a salidas y entradas de jugadores, pero Parejo no se movió ya que Marcelino quiso que se quedara para convertirlo en su prolongación sobre el terreno de juego.
Por ello, al cumplir estos doscientos encuentros, el futbolista madrileño ha señalado que está muy contento en el club, que le supone un orgullo jugar en el Valencia, y que de todo lo vivido hasta ahora se queda en los buenos momentos.
Tras la regularidad mostrada en el actual campeonato, el mejor de su trayectoria como valencianista, reconoce, tras saber que el seleccionador, Julen Lopetegui, presenció en Mestalla el partido Valencia-Real Sociedad, que ir a la selección seria "un sueño y una recompensa".
"El seleccionador tiene sus jugadores y su bloque, pero cada día trato de ser mejor y lo cierto es que aunque me gustaría ir, no es eso algo que tengo siempre en la cabeza", señaló Parejo, mientras que Marcelino ha señalado que, sin duda, le llevaría al equipo nacional.
A los doscientos partidos, Parejo añade 36 goles en Liga, muchos de ellos conseguidos de penalti, suerte en la que es un verdadero especialista, sin que suela repetir la forma de disparar en este tipo de lances, tal y como se demuestra en los cinco que ha lanzado y transformado desde el inicio de la Liga.
Junto a los penaltis, los libres directos han sido otra de sus especialidades y se ha hecho cargo de ellos incluso en etapas no tan brillantes como la actual.
Ahora está centrado en que su equipo alcance la próxima edición de la Liga de Campeones, para lo que deben pensar en "ir partido a partido" porque el Valencia depende de sí mismo para lograrlo.