Lopetegui le “debe” una convocatoria, aunque eso le vaya a complicar sus elecciones para Rusia. Pero si han de ir los mejores o los que mejor están, no hay coartada para el seleccionador. Dani está en ambos grupos...
VALÈNCIA. El capitán del Valencia lleva varias temporadas siendo el mejor del equipo. Años atrás brillar entre tantos futbolistas desconectados o que habían abdicado puede presuponerse sencillo. No lo era, porque el mediocentro siempre estaba en el foco. Algún resbalón suyo fuera del campo no había ayudado, pero con el rumor que solía surgir de la grada cuando el balón era acunado entre sus pies de seda, muchos se han hecho pequeños. Dani, no. Dani las ha querido y las querrá siempre.
Dani ya era de los que más corría de la liga y sigue siéndolo. Ante el Girona, 11’8 km, el tope del equipo. Pero su correr diesel, arrastrando las botas como si éstas fueran de cemento, condicionan su valoración a ojos de la gente. Ahora con el equipo siendo equipo, Parejo está demostrando que puede ser piedra angular de un Valencia grande, competidor, con mentalidad ganadora.
Esa personalidad torera de lanzar un penalti ante el Alavés la temporada pasada con la grada en contra es la misma que le ha dado últimamente al Valencia seis puntos desde los 11 metros ante el Celta y el Girona, en un alarde de liderazgo al alcance de pocos.
Marcelino lo tenía claro, Parejo es un futbolista top. Capaz de resistir el desgaste en el doble pivote sin que su lucidez y precisión para tejer el juego del equipo se resienta. Juego en corto, controles de seda, cambios de orientación milimétricos, llegada, letal a balón parado, pulso firme para tener la pelota como el cirujano que opera a corazón abierto en pleno bombardeo, polivalente… Ese 10 es el capitán de este Valencia, un futbolista de selección.
Hacerse con un hueco en la sala de máquinas de la Roja no es fácil, la competencia es atroz. Pero Parejo corre como el que más, juega como el mejor y su equipo ya gana casi tanto como los de arriba del todo. Lopetegui le “debe” una convocatoria, aunque eso le vaya a complicar sus elecciones para Rusia. Pero si han de ir los mejores o los que mejor están, no hay coartada para el seleccionador. Dani está en ambos grupos.