VALÈNCIA. Cristhian Mosquera, central de la Academia del Valencia CF, que ha entrado en las dos últimas convocatorias de José Bordalás es uno de los mejores centrales de la actual Academia del Valencia, internacional con las inferiores de España y con un futuro prometedor.
El central, nacido en Alicante en 2004, y que posee la doble nacionalidad Colombiana, llegó a la Academia procedente del Hércules CF, como un proyecto muy interesante de jugador que se ha ido puliendo en Paterna y se ha convertido en una realidad.
Mosquera destaca por su inteligencia táctica, la toma de decisiones de saltar al corte o entrar al rival o mantener la posición, siendo un seguro en las categorías inferiores del Valencia CF pese a que ha jugado casi siempre en una categoría superior a la suya, formando pareja con Rubén Iranzo, de la generación del 2003.
Además, el defensor también ha destacado en la Academia por su personalidad con balón, es el que inicia las jugadas en el VCF Mestalla de Angulo y aporta criterio a la hora de sacar el balón, pese a que no destaca por sus desplazamientos en largo.
En cuánto a la velocidad, aprovecha su zancada larga para no sufrir contra delanteros veloces, sin ser extremadamente rápido, se ayuda de la altura, 1'88, para dar caza a los atacantes rivales.
Su altura en este caso no le hace destacar en exceso en los balones aéreos, ya que, no es el apartado goleador su mayor fuerte pero tiene mucho margen de mejora y los informes de la Academia sobre el futbolista son inmejorables.
Termina contrato en 2023 y pese a que el Valencia CF ya se hizo fuerte en la última renovación, con clubes como el Real Madrid apretando hasta última hora, deberá atar pronto a Mosquera en el último escalón que le queda al futbolista para llegar al primer equipo.