ALICANTE. El Hércules elude el descenso a Tercera en los despachos.

La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha optado por la opción de dar por cancelada la Liga regular en el fútbol aficionado, cuando faltan diez jornadas por disputarse en Segunda B, sin que haya descensos y decidiéndose los equipos que ascienden a Segunda A en un 'play-off' exprés (con sede única; formato concentración; y tres eliminatorias a partido único) salvo que finalmente este tampoco pueda disputarse por razones sanitarias, en cuyo caso serían los cuatro equipos con mayor derecho deportivo los que suban directamente. 

Iusport desvelaba la mañana del miércoles que el organismo que preside Luis Rubiales le había adelantado a los barones territoriales que esa es la opción que formalizará este viernes la Comisión Delegada, modificando el Reglamento y las bases de la competición. 

Junto a los blanquiazules, cuya estrella fuera de los terrenos de juego sigue brillando ya que eran penúltimos clasificados en el grupo III, se ve beneficiado también por la decisión federativa el Orihuela que era el colista.

Polémica e impugnaciones

La polémica y las impugnaciones están servidas porque al carecer del ansiado Real Decreto-Ley la decisión es más recurrible que nunca. No obstante lo anterior, la falta del respaldo gubernamental prometido, la Federación ha decidido mover ficha esta semana tal y como avanzamos ya el pasado lunes en Alicante Plaza. 

Rubiales era hace más de dos meses partidario de completar la temporada, aunque implicase jugar más allá del 30 de junio; luego cambió de opinión (influenciado por un Consejo Superior de Deportes que a la hora de la verdad se ha lavado las manos), trasladando a la Federaciones Territoriales para que fuera debatida en su seno una propuesta calcada a la que finalmente se formalizará. Los clubes la respaldaron mayoritariamente pero la misma tampoco se plasmó sobre el papel (sigue sin hacerlo, aunque después de lo del miércoles sería ya el colmo que hubiera un nuevo cambio de rumbo) porque la RFEF esperaba contar con mayor cobertura ante impugnaciones, algo que se le había prometido y que no ha llegado finalmente.

Guiño del destino