VALÈNCIA. Valencia Basket afronta esta noche un partido muy importante en el Mediolanum de Milán, un pabellón que históricamente no se le da demasiado bien. Tras tres derrotas consecutivas, los ‘taronja’ necesitan volver a la senda del triunfo para no perder el tren en una Euroliga muy competitiva.
El equipo de Pedro Martínez llega tras una semana intensa con tres partidos, incluidos dos de la doble jornada europea, que se saldaron con sendas derrotas: la primera ante el Hapoel Tel Aviv en un Roig Arena vacío, y la segunda el viernes en Mónaco, tras una primera parte para el olvido.
Aun así, el equipo se rehízo y logró un triunfo de mucho nivel el fin de semana en Lleida (78-99), manteniendo un 3-0 perfecto en competición doméstica.
En Europa, el panorama no es tan positivo. Las dos victorias y tres derrotas consecutivas obligan a Valencia Basket a volver a ganar para reengancharse en la clasificación, donde ocupa actualmente la 15.ª posición. Además, un triunfo aportaría aire y confianza de cara al doble duelo en el Roig Arena de la próxima semana, ante Dubai y Fenerbahce.
El rival, Olimpia Milano, no será fácil. Llega muy mermado por las bajas de Josh Nebo, Lorenzo Brown y Zach LeDay, piezas clave para Ettore Messina. No obstante, cuenta con la novedad de Nate Sestina, quien firma con los italianos tras abandonar Valencia la semana pasada y sustituye a Vlatko Čančar, que deja Milán tras su flojo inicio.
A pesar de las ausencias, Milán sigue siendo un equipo peligroso. Un ejemplo fue su victoria en Kaunas la semana pasada (78-89), su segundo triunfo en la competición tras el del debut en Belgrado ante Estrella Roja.
El gran nombre del conjunto italiano es el veterano Shavon Shields, con una media de 14 puntos por partido. También habrá que vigilar a jugadores como Marko Guduric, campeón el año pasado con Fenerbahce, Devin Booker o Armani Brooks.
El viaje a Milán no suele traer buenos recuerdos a los valencianos: en seis visitas, solo han vencido en una ocasión, en 2018 (89-93). Desde entonces, han caído 78-71 en 2019, 95-80 en 2021, 90-79 en 2022 y por un abultado 83-52 en su último duelo en Italia ante los de Messina.
Con la única baja de Yankuba Sima, Valencia Basket afronta un partido vital para demostrar que está preparado para esta Euroliga y mantener el ritmo de los puestos de privilegio, que este año estarán más caros que nunca.