VALÈNCIA. Mehdi Nafti llega al Levante con dos experiencias en Segunda División. En la más reciente, la del Leganés, acabó su contrato tras sustituir a Asier Garitano y sacar al equipo de las plazas de descenso a Primera RFEF. Fue su primer banquillo en la categoría, sin embargo, el que guarda una de las extrañas historias del fútbol y sus banquillos. En el Lugo, el Consejo de Administración decidió prescindir de sus servicios en la vigesimoséptima jornada del campeonato, a 28 de febrero, después de coger las riendas albivermellas desde la quinta fecha y colocarse décimotercero a seis puntos del agujero.
La destitución cayó por sorpresa en la parroquia del Anxo Carro, pues las razones deportivas parecían escasas para el cese del franco-tunecino. Había arrancado lanzado a principio de curso tras sustituir a Juanfran, con quien se podría encontrar precisamente este año en su papel como comentarista en los encuentros del Levante. Nafti logró 13 puntos de los primeros 15 posibles, y ganó cinco de sus siete partidos iniciales en el Lugo.
No obstante, el último mes de competición antes de su despido había sido nefasto en cuanto a resultados para la entidad gallega: dos de quince puntos posibles, una racha inversa a aquella con la que comenzó en el club. De hecho, después del gran arranque en siete citas, los quince encuentros siguientes se saldaron con solo dos victorias. En total, 22 partidos dirigiendo a los lucenses y un bagaje de 7 victorias para, eso sí, sacar al Lugo de las posiciones bajeras de la tabla en las que se encontraba a su llegada.
La nota más curiosa de aquella destitución fue que Nafti no pudo dirigir su último encuentro por abandonar la concentración anti-covid del equipo en Almería. El Lugo jugaba en el Juegos del Mediterráneo y el entrenador tuvo que viajar a su domicilio habitual en Cádiz por un imprevisto familiar que no trascendió. Los lucenses perdieron aquel encuentro, a la postre el último de Nafti, y aunque la decisión del Consejo del club se debió "principalmente al análisis de la trayectoria demostrada hasta la fecha, y la dinámica de resultados cosechados" -según comunicó la entidad-, el episodio de aquel sábado precipitó la decisión.