ALICANTE. La semana pasada, desde el Boletín Oficial del Registro Mercantil, el Hércules convocaba a sus accionistas a la celebración el 28 de junio de una Junta General Ordinaria en la que someter a examen y aprobación, en su caso, las cuentas anuales de la sociedad en el ejercicio 2020/21 (el ejercicio pasado, sí).
A diferencia de lo que ha ocurrido en los últimos cuatro años (desde que el primer equipo blanquiazul empezó a hundir cada vez más sus pies en el barro del fútbol no profesional), el club no convocaba también a sus accionistas a una Junta General Extraordinaria en la que proceder a un aumento de capital por compensación de créditos, una operación en la que convertir en acciones el auxilio económico de Zassh Tecnológica (la mercantil de la familia de Enrique Ortiz y de Juan Carlos Ramírez) que permitió a la entidad levantar la persiana en ese ejercicio 2020/21 (al igual que en los anteriores y en el que ahora expira).