ALICANTE. A la espera de ver qué postura toma la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) después de que el Ayuntamiento de Alicante le remitiese que el Antonio Solana estará disponible para jugar todos los encuentros contemplados en el calendario de Primera Federación sin excepción. Así se encuentra el Intercity y por extensión el Real Murcia y el Hércules, los dos conjuntos que han de medirse al primero en mayo y a los que el departamento de Competiciones de la RFEF notificó hace una semana que jugarían en el estadio Rico Pérez a petición del club de los hombres de negro.

El consistorio cumplió este lunes la 'amenaza' disfrazada de enhorabuena anunciada el pasado viernes de que la sustitución de 500 butacas y dos banquillos prevista en la citada instalación de la carretera de Villafranqueza vaya a completarse a 21 de abril, no condicionando su uso (argumento que había justificado el cambio de escenario a ojos de la RFEF) de cara a los envites Intercity-Real Murcia e Intercity-Hércules de las jornadas 35 y 37, respectivamente.

Informes de tráfico y seguridad

Si desde Las Rozas dan marcha atrás a su decisión, a nadie le escapa que el Intercity volverá a solicitar que ambos encuentros se jueguen en el Rico Pérez, en ese caso por razones de logística y contando con la complicidad de Real Murcia y Hércules. No sería algo nuevo, es más, el propio Ayuntamiento de Alicante ayudó a que la RFEF estimase en su momento la petición del Intercity de jugar contra el Barça en Copa del Rey el Rico Pérez y con el Málaga en Liga en Los Arcos. Fue por medio de informes de tráfico y seguridad, es decir, emitidos por una concejalía que no es la de Deportes ni la de Infraestructuras.

La disputa del Intercity-Real Murcia está programada para el domingo 4 de mayo desde las 17:30 horas, mientras que para las 19 horas del sábado 17 está fijado el inicio Intercity-Hércules.