CASTELLÓ. El técnico del Castellón, Johan Plat, confía en que la última victoria frente al Sporting de Gijón dé tranquilidad a sus jugadores para encarar la recta final de temporada y que este factor ayude al equipo a ofrecer buenas prestaciones en los partidos que restan.

“Puede haber algo menos de tensión después de la manera en que acabamos el partido contra el Sporting. Espero que los jugadores estén más liberados, que no relajados. A ver si podemos traducir esto en algo bueno”, ha reconocido.

No obstante, Plat ha advertido de que los albinegros aún no tienen la permanencia asegurada, al tiempo que ha asegurado que los jugadores mantienen la intensidad habitual en el día a día. “Aún no estamos salvados y, por lo que he visto esta semana, no hace falta motivar a los jugadores. Están entrenando bien, con muchas ganas. Vamos con la intención de conseguir una victoria a domicilio contra un rival de arriba”, ha subrayado en referencia a su próximo rival, el Mirandés.

Los de Alessio Lisci, que llegan a este choque en plena pelea por el ascenso directo, ganaron a los albinegros en la primera vuelta explotando el contragolpe ante un Castellón muy vulnerable atrás. Este sábado, el planteamiento de los burgaleses podría ser parecido, aunque Plat no descarta un plan B. “Esperamos que nos jueguen directo o en bloque bajo y estamos preparados para afrontar ambas situaciones”, ha señalado.

El entrenador del Castellón no ha dado pistas sobre el modelo de juego que va a utilizar, aunque ha dejado entrever que la baja de Daijiro Chirino no condicionará su dibujo, pudiendo jugar “tanto con defensa de tres como de cuatro”.

Además, ha confirmado que los lesionados Salva Ruiz y Brian Cipenga ya están recuperados y que estarán a su disposición en Anduva.