ALICANTE (EFE). Juli Cerdá, capitán del Alcoyano, cree que es momento de mantener "al 100 por 100" la confianza en el equipo pese a la oportunidad perdida de distanciarse de sus perseguidores y abrir brecha a falta de cinco jornadas tras ceder la primera derrota liguera desde el pasado mes de noviembre al caer 0-2 frente al Villarreal B.
"Seguimos dependiendo de nosotros, es verdad que la clasificación se ha apretado pero mantenemos una ventaja de dos puntos sobre Villarreal B y Hércules a falta de cinco jornadas. Nosotros ya hemos jugado contra ellos y el Ibiza y habrán enfrentamientos directos entre ellos. Hemos de olvidarnos del calendario y centrarnos solo en el siguiente partido, esa mentalidad es la que nos ha llevado hasta aquí", explica.
Para el delantero "no es momento de volvernos locos, perder formar parte del fútbol y nuestro único lamento fue la forma en la que perdimos. En ningún momento del partido fuimos nosotros, es lo que más nos ha molestado, mucho más que la derrota en sí. Quizás la importancia del partido nos llevó a cometer más errores de lo que es habitual en nosotros", añadió.
El veterano futbolista, que tras una larga trayectoria en el fútbol profesional decidió el año pasado regresar al equipo de su ciudad, considera que "toca aprender, analizar todo lo que se hizo mal ante el Villarreal B y tomar nota para que no vuelva a suceder".
"El equipo está tocado porque dejamos escapar una buena oportunidad, pero a partir del miércoles se pasará página y empezaremos a pensar en ganar el domingo al Levante B. Somos un vestuario fuerte y saldremos adelante", concluye.