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VALÈNCIA. El levantinismo está de celebración. El Levante UD certificó este fin de semana su regreso a Primera División, logrando así el sexto ascenso de su historia a la máxima categoría del fútbol español. La afición ‘granota’, fiel a su equipo, respondió con una masiva muestra de apoyo en una jornada festiva que convirtió el centro de Valencia en un mar de banderas azulgranas.
El ascenso se confirmó el pasado domingo en El Plantío, donde el Levante se impuso por 2-3 al Burgos en un encuentro no apto para cardíacos. El conjunto dirigido por Julián Calero se vio atrás en el marcador hasta en dos ocasiones, pero fue un gol in extremis de Carlos Álvarez en el tiempo añadido el que desató la locura y certificó matemáticamente el regreso del club a la élite del fútbol español. La victoria fuera de casa puso el broche a una temporada marcada por la regularidad de los ‘granotas’, que sin duda han merecido ser el primer equipo en ascender.
Las celebraciones oficiales comenzaron este lunes a las 19:00 horas con una recepción en la Delegación del Gobierno de la Comunitat Valenciana, donde la plantilla fue recibida por la delegada Pilar Bernabé. “La ciudad tiene ahora a dos equipos en Primera y todos los valencianos disfrutamos de este ascenso”, manifestaba.
Desde allí, la expedición se trasladó a la Basílica de la Mare de Déu, donde el equipo ya fue recibido por centenares de aficionados. La jornada institucional continuó con visitas a la Diputación de Valencia y al Palau de la Generalitat: "Estamos muy contentos de tener un equipo más en la máxima categoría de la ciudad, de llevar el nombre de la ciudad por toda la Península. Ojalá podemos hacer más allá", decía el capitán Iborra. A su vez, el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ensalzó al club por su éxito: “La ilusión de la que nos cargasteis ayer y durante toda la temporada para devolver al Levante donde se merece el Levante es todo un honor”.
El momento culminante llegó a las 21:30 horas, cuando el equipo se dirigió a la Plaza del Ayuntamiento, donde miles de seguidores ya aguardaban desde primera hora de la tarde. Cánticos, vítores y una euforia desatada marcaron la llegada del conjunto granota. La Plaza de la Virgen, del Ayuntamiento y sus alrededores se llenaron de aficionados celebrando una gesta que no solo devuelve al club a Primera, sino que reafirma el vínculo entre el equipo y una afición que acumulaba ya tres años en el ‘infierno’ de Segunda.