VALÈNCIA.No fue solo una carrera. Fue un ejemplo. Una historia de superación, de amistad y de auténtica inspiración. Àlex Roca y José Luis García Serrano, ‘Jota’, cruzaron juntos la meta de los 12 kilómetros del Santa Eulària Ibiza Marathon en una imagen que quedará grabada en la memoria colectiva del atletismo popular.
El atleta catalán, con una parálisis cerebral del 76%, y el triatleta paralímpico con discapacidad visual compartieron cada zancada en una carrera tan desafiante como emotiva. Lo hicieron con la complicidad que nace del respeto y la admiración mutua. Y con una aliada fundamental: Mari Carmen, pareja de Àlex, que actuó como intérprete para facilitar la comunicación entre ambos.
“Hoy he tenido el honor de correr junto a Jota, un referente y una inspiración. Yo me comunico en lengua de signos. Él no ve. Y, aun así, nos hemos entendido desde el primer momento. Porque cuando hay conexión y respeto, el deporte habla un lenguaje universal que va más allá de cualquier barrera. Gracias, Jota, por este regalo compartido. Lo importante no son los kilómetros que corres, sino el mensaje que dejas al pasar”, declaraba Álex Roca a su llegada a meta.
La carrera, celebrada en un ambiente festivo y arropada por miles de participantes y espectadores, fue testigo de uno de los momentos más especiales de su octava edición. Àlex, que ya había corrido en varias ocasiones en Ibiza, volvió a elegir la isla “por su energía, su belleza y su organización, quien siempre me trata de manera increíble”. Pero esta vez su participación en la prueba tenía un objetivo que trascendía mucho más allá de lo deportivo: demostrar que las barreras no existen.
Desde la organización del Santa Eulària Ibiza Marathon no dudaron en destacar el valor de este reto compartido: “Lo que han hecho Àlex y Jota va mucho más allá del deporte. Es un ejemplo de inclusión, compañerismo y valentía que representa perfectamente el espíritu de esta prueba”, apunta Francisco Larrey, director de la prueba.
El evento, que reunió a más de 6.000 corredores con un 70% de participación internacional, demostró una vez más por qué se ha consolidado como uno de los grandes referentes del running en España. Más allá de las cifras y los cronos, fue la historia de Àlex y Jota la que puso a todos de pie.
Y es que, en ocasiones, los auténticos vencedores no son los que llegan primero, sino los que consiguen emocionar a todo un pelotón.