BENIDORM. El Servigroup Hoteles Benidorm afronta este sábado (19:30 horas) un partido clave para sus aspiraciones de permanencia en la pista del Bada Huesca, colista de la competición, ante el que quiere confirmar la reacción experimentada desde la llegada a su banquillo de Marko Krivokapic.

El conjunto benidormense, que afronta el partido revitalizado en su ánimo tras sumar esta misma semana ante Bidasoa, ha logrado escapar del descenso y de la promoción, aunque una derrota en Huesca lo volvería a meter de lleno en la zona de peligro.

El conjunto oscense, situado a tres puntos del Benidorm, ganó en el Palau en la primera vuelta por 28-30, por lo que también está en juego el coeficiente particular, un factor que puede ser definitivo en una lucha tan equilibrada por la salvación como la de este curso.

Krivokapic buscará los primeros puntos a domicilio desde su llegada al banquillo en una pista que no se le da bien al Benidorm históricamente.

El serbio no podrá contar una semana más con Ramiro Martínez, Leo Alonso y David Roca, bajas de larga duración, ni con el portero Domenech.

El técnico, según explicó este viernes en una entrevista con EFE, confía en que su equipo se mantenga con opciones de triunfo hasta el final del partido para trasladar toda la presión al Huesca, del que destacó su mejoría en el juego en la segunda vuelta y la aportación de los refuerzos.