VALÈNCIA. Jope Moreno y Daniel Molina lograron la medalla de oro en los World Games, la cita internacional más prestigiosa para las disciplinas no olímpicas, celebrada este año en Chengdú, China.
La gimnasia acrobática, aunque todavía no es olímpica, goza de una comunidad creciente en España y cuenta con clubes y escuelas en plena expansión. Este resultado supone un impulso sin precedentes para el desarrollo del deporte, visibilizando a una disciplina que combina fuerza, flexibilidad y arte en cada movimiento.
La pareja masculina que entrena en Manises, ya consiguió un hito al clasificarse por primera vez para la competición donde se enfrentarían a potencias mundiales como Azerbaiyán o Portugal.
Pese a la presión del escenario, consiguieron clasificarse con dos ejercicios muy buenos. Primeros en dinámico y terceros en equilibrio, se metían en la final de cuatro. Caprichos del destino, serían los primeros en salir a competir en la final siendo la nota a batir del resto de participantes.
La tensión estaba servida al ir viendo las notas que iban saliendo, sin lograr arrebatarles el primer puesto.
El momento de máxima tensión llegó con Portugal. Era oro o plata. La nota, tardó un poco en salir…España rugió al ver que se situaban terceros y España se alzaba con el oro y el honor de escuchar el himno nacional en la entrega de medallas.
"La competición se desarrolló como la habíamos entrenado. Salir primeros a la final era el escenario menos atractivo, pero lo traíamos preparado", afirmó Guillem Martínez, entrenador de la pareja.
Con este triunfo, la gimnasia acrobática nacional da un paso decisivo en su proyección internacional y envía un mensaje inspirador a las nuevas generaciones de jóvenes deportistas.