VALÈNCIA. Nuevos capitanes en el Levante. No hay más remedio que cambiar el róster de portadores del brazalete después de que los anteriores hayan abandonado Orriols en masa. No están Postigo, Femenías, Vezo ni Álex Muñoz. Respecto a los del pasado curso, solo queda un Pablo Martínez susceptible de ser traspasado en los últimos coletazos del mercado -de hecho, a esta hora de la tarde, el madrileño ni siquiera está inscrito en La Liga, uno de los grandes problemas a los que se enfrenta el club en las horas previas al estreno en El Molinón-. Los nuevos palos que sujetan la vela granota son el propio Pablo, Andrés Fernández, Iborra... y José Morales.
El Comandante se reencuentra con el brazalete. Aquel que portó con orgullo y como uno de los ídolos del respetable, una parte del cual le perdió el alego cuando decidió firmar por el Villarreal tras activar su clásula de liberación una vez el Levante consumó su último descenso a Segunda División. Otra parte de la grada, le guarda adoración, aunque Morales ha perdido popularidad entre el levantinismo y tendrá que volver a ganárselo en su regreso. Por el momento, y a pesar de la animadversión que encuentra el extremo en cada publicación que la entidad de Orriols lanza en sus cuentas en redes sociales, Morales será capitán.