VALÈNCIA. El Valencia CF tiene por delante decisiones importantes para configurar su defensa de cara al próximo curso. Con varios jugadores en la plantilla actual, renovaciones abiertas, cesiones por gestionar y descartes sobre la mesa, se encaja un puzle complejo en la zona de centrales. A día de hoy, el club cuenta con seis futbolistas del primer equipo en esa posición y varios canteranos que llaman a la puerta.

Renovaciones abiertas para Mosquera y Tárrega

La pareja formada por Cristhian Mosquera y César Tárrega parte como la titular sobre la que el club debería construir. Ambos han demostrado su nivel esta temporada siendo indiscutibles y también consolidándose como pareja titular en la selección Sub-21.

En el caso de Mosquera, el Valencia tiene como prioridad cerrar su renovación cuanto antes. El central finaliza contrato en 2026, y aunque la voluntad del club es clara, la negociación no parece fácil. La pasada semana ya hubo una reunión con su agente para acercar posturas y la idea es resolver su futuro en las próximas semanas. Si no se alcanza un acuerdo para ampliar su contrato, el jugador saldría traspasado este verano.

Por su parte, Tárrega vive una situación mucho más sencilla. Tras su irrupción esta campaña, el club trabaja en una mejora de contrato. El central tiene vínculo hasta 2028 y quiere continuar en Mestalla.

Diakhaby cuenta para Corberán

A día de hoy, Mouctar Diakhaby sigue siendo una pieza importante en los planes del Valencia. Tras superar su grave lesión, el central ha recuperado sensaciones y ha sido el primer recambio habitual de los titulares cuando ha estado disponible.

Diakhaby tiene contrato hasta 2027 y, salvo sorpresa, continuará en la plantilla aportando una experiencia necesaria en esa posición.

El futuro de Yarek, por decidir

Una de las decisiones más delicadas gira en torno a Yarek Gasiorowski. El joven central, una de las grandes promesas de la cantera, ha visto cómo su protagonismo se ha reducido drásticamente con la llegada de Corberán. Desde febrero, apenas ha disputado seis minutos oficiales, lo que abre la puerta a diferentes escenarios para la próxima temporada.

Su situación está muy ligada a lo que ocurra con Mosquera. Si el hispano-colombiano sigue, Yarek tendría complicado sumar los minutos que necesita para seguir progresando. En ese caso, una cesión sería una opción lógica. Si por el contrario se produjera la salida de Mosquera, el valenciano podría dar un paso adelante y tener más minutos. Además, en las últimas semanas ha surgido el interés del Feyenoord, lo que añade una posible vía de traspaso.

Cenk y Cömert: sin sitio en la plantilla

Por otro lado, tanto Cenk Özkacar como Eray Cömert regresan tras sus cesiones en Valladolid, pero no entran en los planes de Corberán. El club trabaja para buscarles una salida este verano. Cenk tiene contrato hasta 2028 y Cömert hasta 2026, por lo que se tratará de encontrar soluciones en forma de traspaso o nuevas cesiones para liberar fichas y masa salarial.

El camino para Iker Córdoba e Iranzo

En los canteranos también hay movimientos por hacer. El Valencia tiene plena confianza en Iker Córdoba, que apunta a salir cedido a Segunda división siguiendo el camino que en su día hizo Tárrega. El objetivo es que siga creciendo para, en un futuro, poder pelear por un puesto en el primer equipo.

Por su parte, Rubén Iranzo también tiene opciones de formar parte de la plantilla desde el inicio. Su capacidad para jugar como lateral le dan muchas papeletas, especialmente ante la lesión de Thierry Correia, que no podrá comenzar la temporada. Corberán lo evaluará durante la pretemporada y decidirá si mantiene su ficha en el primer equipo o si, por el contrario, se busca una salida en forma de cesión.

Con todos estos frentes abiertos, el Valencia CF afronta un verano intenso en la defensa. La renovación de Mosquera, la continuidad de Tárrega, la gestión del caso Yarek y las salidas de Cenk y Cömert serán las claves de esta planificación.