VALÈNCIA. El Valencia Mestalla se la juega en esta recta final de temporada. Tras los malos resultados cosechados en los últimos tres partidos, con solo un punto conseguido y dos derrotas por la mínima, los pupilos de Angulo han perdido su plaza de promoción a Primera RFEF y ahora se encuentran a dos puntos del quinto clasificado, el Torrent.
Por consiguiente, el Mestalla tiene ahora poco margen de error: quedan tres partidos, dos de ellos en el Antonio Puchades, para volver a recuperar su posición noble en la tabla que le permita poder jugar las eliminatorias para ascender de categoría. Los rivales son el Cornellà, prácticamente descendido, el Sant Andreu, que se juega subir de manera directa, y el Sabadell, el cual se halla ahora mismo a tres puntos de los che. Es decir, partidos muy complicados donde el factor local puede jugar un papel fundamental.
También son choques importantes para varios jugadores de la plantilla valencianista. Como es lógico, no supone lo mismo jugar en Primera RFEF que en Segunda. Por escaparate, por proyección y, sobre todo, por nivel, tanto para interés del primer equipo como para el propio futbolista. También porque hay jugadores en el Valencia Mestalla en los que el club confía y cuya idea es cederles a la Liga Hypermotion la temporada que viene, aunque un ascenso podría detenerlo todo para poder tener un filial fuerte en esa categoría más exigente.
Fijándonos en la plantilla actual, hay varios casos de jugadores que se encuentran en este último punto comentado. Por ejemplo, Mario Domínguez. Recién renovado y con proyección de primer equipo, la idea del club es evaluar su valía en pretemporada para decidir qué camino tomar con él, bien quedárselo o bien cederle. Con un Mestalla en Primera RFEF el tema quedaría algo más enfocado a esa dirección. Lo mismo puede suceder con Vicent Abril, que tiene papeletas incluso de quedarse ya con los 'mayores', Iker Córdoba, muy buen valorado por Corberán y cuerpo técnico como posible cuarto central, Pedro Alemañ, otro del gusto del de Cheste, Martín Tejón, que gusta en la Hypermotion o Rubén Iranzo, otro de los que siempre echa mano el primer equipo.
Todos ellos, al igual que algunos otros como Hamza Bellari o Pablo López, tendrían muchas papeletas de seguir en el Mestalla si se consiguiera ese ascenso a Primera RFEF que ya lleva varias temporadas intentándose, si bien es cierto que no se ha tenido muy cerca. En otro contexto parece difícil que alguno de ellos repita temporada en Segunda RFEF, ya que el propio club considera que están para dar un salto más. Otro caso es el de Warren Madrigal, cuya continuidad solo se valora con ese ascenso bajo el brazo.