VALÈNCIA. Cumplidos los 100 días de Corberán en el Valencia CF. Madrugada del 25 de diciembre de 2024. En plena Nochebuena, Carlos Corberán y el Valencia CF se estrechaban la mano: "Carlos Corberán se convierte en el nuevo entrenador del Valencia CF hasta 2027. El Club ha comunicado al West Bromwich Albion FC la ejecución de la opción de salida que se estipula en su contrato para quedar desvinculado del conjunto inglés", rezaba el comunicado del club.
La situación era límite: 12 puntos de 51 disputados, el Valencia CF a punto de culminar la peor primera vuelta de su historia y la permanencia a más de un partido de diferencia. No obstante, los dirigentes del conjunto valencianista estaban alargando la agonía porque no se ponían de acuerdo con Rubén Baraja y tampoco terminaban de cerrar al sustituto, lo cual provocó que la mala racha de resultados se prolongara todavía más en el tiempo. Tanto, que Carlos Corberán aterrizó en Valencia con el deber de hacer números de Europa para salvarse, cosa que hasta el momento está cumpliendo con creces.
El técnico de Cheste llegaba a Valencia tras previo pago de cláusula por parte del club para desvincularle del West Bromwich, un movimiento que sorprendió a la parroquia che. Los números, unidos al coste de la salida de Baraja, se disparaban a unas cifras que hacía tiempo que Lim no autorizaba a desembolsar. De hecho, y dicho por una de las alternativas al banquillo (Quique Sánchez Flores), el club iba dejando caer que no iba a acudir al mercado de invierno, cosa que días después también cambió con las llegadas de Sadiq, Aarons e Iván Jaime. Cosas que suelen pasar en el día a día Valencia de Peter Lim, que nada es precedible salvo el retroceso deportivo evidente que se aprecia cada año en el césped y en el status del club.
Rutinas nuevas en busca del cambio de chip
Lo primero que hizo Corberán al pisar la Ciudad Deportiva de Paterna fue modificar comportamientos, malas rutinas y vicios. Muchos de ellos se habían instaurado en una plantilla que hasta llegó a pedir a Baraja hacer más horas de entrenamiento e intensidad. Por ello, y analizando el problema, el de Cheste vino con un grupo de trabajo que desde el primer día quiso darle mucho protagonismo a las horas que hacía y pasaba el grupo en Paterna.
Se comenzó haciendo hincapié en el apartado físico, con dobles sesiones y seguimientos tan básicos como el de la báscula del peso, algo que se había perdido en los últimos tiempos. También con sesiones de vídeo y táctica, que más que nunca son imprescindibles para los pupilos de Corberán. En líneas generales, lo que quiere el entrenador del Valencia CF es que sus futbolistas piensen más horas en fútbol y se comporten como tal durante el resto del día, evitando el caos y descontrol que ha llegado a haber esta temporada o en anteriores ocasiones con Meriton al mando.
El vestuario creyó en él desde el primer día
En el seno del vestuario la llegada de Carlos Corberán supuso un soplo de aire fresco. El discurso exigente del entrenador en su primer día en Paterna caló en unos futbolistas que han cambiado su cara por completo en prácticamente todos los partidos entrenados por el valenciano hasta la fecha. Los capitanes (Gayà, Jaume y Pepelu) cerraron filas y, manifestado por el propio Corberán, dieron un paso adelante en ese momento tan importante de la temporada: de salir mal, el desastre estaba más que asegurado.
De hecho, se vivió una situación límite en lo deportivo cuando en la jornada 20 la Real Sociedad visitó Mestalla el domingo como último plato de la jornada liguera. Los che saltaron al campo con 13 puntos y a siete de la salvación, un panorama muy desalentador y que parecía muy difícil de doblegar. Aquella victoria supuso el inicio de una buena racha de resultados en la segunda vuelta.
Mestalla vuelve a ser un fortín
Uno de los objetivos de Corberán al llegar era el de recuperar el factor Mestalla. Hasta su llegada, el Valencia CF solo había ganado dos choques en casa y el feudo che era un lugar apetecible para los contrincantes, una tendencia que ha cambiado por completo. El Valencia CF ya suma 24 puntos de 45 en Mestalla, sobrepasando el 50% y con una dinámica muy positiva en la segunda vuelta: cinco victorias en seis enfrentamientos. Además, ya marca más goles de los que encaja (21 anotados por 18 recibidos), convirtiéndose en el séptimo mejor local de la categoría con Osasuna y Espanyol. Llueve menos.
Números de Champions
Aunque la palabra "Champions League" quede lejos ahora mismo de la realidad valencianista, la realidad es que, a día de hoy, con Corberán los números de la segunda vuelta son de Champions. El Valencia CF suma 18 puntos de 30 y solo Betis, Madrid y Barcelona han conseguido más puntos en estos diez partidos (de la jornada 20 a la 29). A estos números se les añade una mejor dinámica como visitante, con tres empates en salidas complicadas (Villarreal, Girona y Osasuna).
Por ejemplo, los che han sumado en esta segunda vuelta diez puntos más que Leganés, ocho más que Alavés, cinco más que Espanyol o catorce más que Las Palmas, rivales todos por la permanencia.
En síntesis, Corberán aprueba con nota tras pasar sus 100 primeros días como entrenador del Valencia CF. Cinco victorias y cuatro empates pueden dar fe de ello tras solo haber sumado dos victorias hasta su llegada. Su discurso, compromiso y trabajo desde el primer día han sido determinantes para que la situación deportiva cambie por completo en apenas tres meses, hasta tal punto de depender de sí mismo para salvar la categoría después de haber estado a más de dos partidos de la permanencia no hace tanto.