VALÈNCIA. El Valencia CF vuelve a marcharse al parón navideño en una situación límite. Los de Corberán no levantan cabeza y, con 16 puntos en 17 partidos, el momento comienza a parecerse, cada vez más, al de la temporada pasada, una dinámica que acabó costándole el puesto a Rubén Baraja.
El equipo no solo necesita regalos esta Navidad, sino que tiene muchos deberes pendientes. Tras 17 jornadas, solo ha sido capaz de ganar en tres ocasiones, apenas una victoria más que el curso anterior a estas alturas de la competición.
Un equipo frágil, sin gol y dependiente del acierto de Hugo Duro
Este mal momento no solo se refleja en el escaso número de triunfos y en la baja puntuación, anclada en 16 puntos. El conjunto valencianista apenas ha logrado anotar 16 goles, de los cuales 6 llevan la firma de Hugo Duro. Una cifra que incluso empeora los 17 tantos que el equipo había marcado exactamente hace un año en esta misma jornada.
La defensa es otro de los grandes puntos débiles del equipo. Con 26 goles encajados, el Valencia es actualmente el cuarto equipo más goleado de la competición, un lastre difícil de compensar con tan poca producción ofensiva.
Un ejemplo claro: el partido ante el Mallorca
El partido ante el Mallorca fue un claro ejemplo de todas las debilidades que arrastra este Valencia. Con muy poco, los rivales son capaces de hacerle daño. En cambio, el equipo de Corberán necesita muchos minutos de dominio para generar peligro y, aun así, rara vez logra sumar algo positivo en ataque, sin ser capaz de darle la vuelta a los partidos.
En cuanto el rival se adelanta en el marcador, el encuentro queda prácticamente sentenciado, ya que los ‘ché’ no marcan dos goles en un partido liguero desde el pasado 23 de septiembre en Cornellà, en el empate 2-2 ante el RCD Espanyol.
Por todo ello, siendo tan frágil atrás y con tan poco gol, la derrota o el empate a uno se convierten en los resultados más repetidos y, hasta cierto punto, lógicos. Sin embargo, sumar de uno en uno ya no es suficiente.
Llega la Navidad, y el valencianista volverá a pasar estas fiestas con su equipo al borde del abismo. 16 puntos, solo uno por encima del descenso, y la sensación de que mucho debe mejorar este Valencia si no quiere sufrir por la permanencia hasta el final de la temporada.