VALÈNCIA. El CEO de Fútbol del Valencia CF, Ron Gourlay, ya está manos a la obra en las oficinas del club de Mestalla. Una vez aterrizado en la ciudad, el máximo responsable del organigrama de la entidad tiene que 'atacar' diferentes frentes abiertos que han ido acumulándose encima de la mesa en las últimas semanas. 

A la espera de arrojar luz al valencianismo, Gourlay tuvo una primera puesta en escena con un mensaje en la línea del comunicado que le dio la bienvenida hace 40 días. "Estoy aquí para devolver al club donde debe estar", dijo ayer en las puertas de las oficinas. Es decir, un escenario similar al que trasladó el club con su frase "devolver al club a la élite del fútbol europeo". 

Para conseguirlo, el tándem de Gourlay con Carlos Corberán tiene un puzle difícil de encajar. En primer lugar, el caso de Cristhian Mosquera exige una respuesta contundente. El canterano ha rechazado la oferta de renovación y quiere salir al Arsenal, que no llega a las pretensiones del Valencia CF. Gourlay tiene que gestionar una situación espinosa en una parcela que ya ha perdido a un efectivo prometedor con la venta de Yarek Gasiorowski al PSV Eindhoven. 

En la confección de plantilla, las renovaciones de Javi Guerra, César Tárrega y Diego López están en la hoja de ruta. El de Gilet tiene cita el jueves para conocer las intenciones del club una vez ha manifestado su deseo de escuchar al Valencia CF para seguir en Mestalla. En la misma situación están Tárrega y Diego López, aunque las conversaciones están más encaminadas. Además, Corberán ha dado 'luz verde' a la renovación de Jesús Vázquez y es otra vía por rematar. 

Además de las renovaciones, la 'Operación Salida' ha comenzado con las bajas de Yarek, Germán Valera y Hugo González. No obstante, hay jugadores como Guillamón, Canós, Almeida o Fran Pérez que tienen su futuro incierto. 

En el capítulo de altas, cerrar definitivamente el fichaje de Julen Agirrezabala es una prioridad para el Valencia CF. Sin Yarek y con Mosquera deseando salir, Corberán necesitará como mínimo dos centrales, un pivote que cubra la baja de Enzo y un goleador para competir con Hugo Duro. Todo ello sin desprenderse de más jugadores.