VALÈNCIA. Sin un brillo especial, pero con avance efectivo. Con mejoras y remiendas. Con retoques, pero con resultados. El Levante de Julián Calero sigue sin perder en pretemporada y ofreciendo unas sensaciones que, aunque mejorables, son radicalmente distintas a las que ofrecía el equipo de Javi Calleja hace exactamente un año. Entonces se alcanzó el inicio de Liga sin ganar y con el equipo inmerso en los vaivenes del mercado de fichajes low cost que, como hoy, estaba obligado a gestionar Felipe Miñambres. No obstante, y a pesar de que a Calero le siguen restando agujeros por tapar con nuevas caras que aterricen próximamente en Orriols, su Levante funciona.
Hasta el amistoso de este sábado ante el Villarreal B, los granota solo habían encajado un tanto, el que marcó Stoichkov en el enfrentamiento ante el Alavés. En el duelo ante el filial groguet reinó menos el orden y el Levante tuvo que remontar por partida doble, en un final eléctrico de encuentro. No obstante, en el resto de citas, el conjunto de Calero se ha mostrado fiable y con un orden marcial en retaguardia.
Otro de los puntos positivos, de momento, en la pretemporada granota -a la que le restan dos citas ante rivales de la categoría como Zaragoza y Elche- es que los hombres llamados a ser clave este curso están empezando a aportar. Uno de ellos es José Morales, que este sábado abandonó la posición de punta en la que le había colocado el técnico madrileño y, en esa demarcación, se le vio más participativo. Anotó su primer tanto desde su regreso.
Además, sigue aportando Pablo Martínez, quien sigue siendo la pieza más codiciada en el mercado del Levante. El último interesado, el Valladolid, sigue sin poner encima de la mesa una oferta que convenza, pero la dirección deportiva es consciente del compás de espera con el '10'. El mercado es largo y con Pablo habrá que esperar a que los clubes que le tienen entre su lista de futuribles se despojen de los jugadores que hoy taponan su fichaje. Mientras tanto, es uno de los importantes para Calero.
Mientras tanto, el entrenador espera refuerzos después de que haya podido cristalizar la marcha de Dani Gómez a préstamo. El club se ha deshecho de uno de los salarios más relevantes del vestuario, y ahora la parcela a reforzar es la zaga. Además, se continúa a vueltas con la posición de Andrés García, que sería el 'fichaje' en los costados siempre que se consiga firmar a un lateral diestro que aterrice para ser titular por delante de Xavi Grande. Es el siguiente objetivo. Aún así, con las armas de las que dispone Calero, de momento los suyos carburan antes de visitar Gijón para abrir boca.