VALÈNCIA. “Hoy me despido de este gran club, en el que he sido muy feliz. Gracias a Quico y a todas las personas del club, por el buen trato hacia mí y por la lucha constante en beneficio del club”. Así se ha despedido del Levante Róber. A través de una carta difundida en sus redes sociales, el central ha agradecido a personal del club y afición después de siete temporadas vistiendo la granota.
El gallego firmará por el Sporting de Gijón tras llegar ayer a Asturias y después de agotar su contrato en el Ciutat el pasado 30 de junio. Pier es uno de los centrales que se había convertido en pieza capital en el engranaje de Calleja en la segunda parte de la temporada. El más regular, en cuanto a minutos, de la zaga del técnico en 2023. Sin embargo, y pese a que la puerta a su ampliación residía entornada pese a concluir su vínculo, la no cabida de su ficha en las maltrechas cuentas del club han llevado al coruñés a buscar otro escudo.
El Levante sí pudo encontrar hueco para Postigo, que se encontraba en una situación similar -con contrato vencido pero a la espera de que el Levante decidiera sobre su reincorporación-. La del capitán, aún así, era una situación más sencilla que la del gallego por la capacidad para hacerle espacio económico. Hoy, la zaga de Calleja cuenta con el propio Postigo, Dela, Vezo -aunque bien podría ser una pieza de salida en la recta final de la actual ventana de traspasos- y Álex Muñoz como pieza polivalente.