Hoy es 6 de octubre
Valencia CF y Levante UD están dentro del objetivo clasificatorio de la temporada pero sus cifras son preocupantes. Mientras los de Marcelino, terceros, empiezan a acumular bajas y derrotas, los dos últimos empates han impulsado anímicamente a los granota pese a estar al borde del descenso.
VALÈNCIA. Este derbi vale doble. Valencia CF y Levante UD chocarán en Mestalla con la misma necesidad: ganar, aunque ambos llegan cegados por sus últimos resultados. El Valencia llega de bajón, lastrado por las bajas, los arbitrajes y una epidemia de lesiones que lo han dejado lleno de achaques para el partido. El Levante viene de subidón después de igualar un 2-0 en contra en Riazor ante un rival directo como el Depor y de obrar la machada de empatar en el Ciutat ante el Real Madrid.
Las impresiones que desprenden ambos conjuntos en las horas previas al derbi contrastan con su situación en la tabla. Aunque la dinámica indica otra cosa y la sensación -de intranquilidad- camina hacia el mismo lado, el Valencia está dentro del objetivo de la temporada. El equipo es tercero con 40 puntos, afianzado toda la temporada en puestos de Liga de Campeones. Enfrente, el Levante está solo tres puntos por arriba de la zona de descenso aunque también cumple con la meta de la permanencia. La percepción, no obstante, es que el Levante, que pelea por burlar el descenso, llega mejor al partido que el Valencia, que está en el podio de la Liga.
El Valencia todavía no ha ganado en la segunda vuelta de la competición de Liga. Acumula tres derrotas. Si nos ceñimos solo a la competición de la regularidad, Marcelino tiene motivos para preocuparse porque la racha es negativa. Desde que perdiera en Getafe por primera vez en la temporada y hasta la derrota en el Wanda Metropolitano del fin de semana pasado, el equipo ha disputado nueve partidos y solo ha sido capaz de ganar en tres de ellos ante Celta, Girona y Deportivo. Por contra, ha caído seis veces frente a Getafe, Eibar, Villarreal, Las Palmas, Real Madrid y Atleti. De 27 puntos posibles ha rascado 9 y ha dejado escapar 18. En el mismo tramo, su trayectoria en Copa dice que desde los cuartos de final el equipo ha perdido dos partidos, ha empatado uno y ha ganado tres. Los 31 puntos que almacenó hasta visitar Getafe ganando 9 partidos y empatando cuatro, sin ceder ninguna derrota, lo mantienen arriba en la tabla.
El Levante llega emocionalmente más entero aunque le duele la baja de Jefferson Lerma, su mejor efectivo en la medular. Muñiz tiene un agujero en la parcela central de la defensa pero ha cerrado las bandas con Coke y Luna. El veterano Pazzini eleva el nivel de su delantera, donde empieza a despertar el anárquico Boateng.
Muñiz estira el cuello con los dos últimos empates, que han cambiado la perspectiva negativa en el club anterior a la visita a Riazor, pero se salva porque su equipo tiene la condición de ser el rey del empate en la categoría. Con once tablas, ningún otro equipo empata más que el blaugrana en la Liga. Desde la última victoria, conseguida en noviembre en la jornada 12, el equipo granota no gana. Ese triunfo más cinco empates y cinco derrotas colocan al equipo cerquita del precipicio con 20 puntos. Muñiz solo ha ganado tres partidos. El caos en el que viven Deportivo, Málaga y Las Palmas, con cambios permanentes de entrenador han jugado hasta ahora en favor de la salud granota.
En el duelo vecinal de Mestalla el que gane reinará en la ciudad por unas horas y, al mismo tiempo, sumará tres puntos que servirán para estabilizarse en zona de Liga de Campeones en caso de los blanquinegros y para alejarse del furgón de cola de la tabla en caso de los blaugrana.