Hoy es 6 de octubre
MURCIA. Suma y sigue para llegar a las semifinales del Masters 1.000 de Miami. Carlos Alcaraz Garfia se impuso claramente al estadounidense Taylor Fritz 6-4 y 6-2 y tras 1 hora y 17 minutos de un partido que se aplazó el día anterior por la lluvia. El murciano, cada vez más seguro de sí mismo y otorgando menos al rival, sea el que sea, se medirá al italiano Jannik Sinner en la pelea por un puesto en la final. Será a la una de la madrugada del viernes al sábado -hora española-. En el otro duelo de esta ronda se vivirá un duelo ruso Daniil Medvedev-Karen Khachanov.
Era el primer encuentro entre ambos y el español, a sus 19 años el número 1 del mundo, sabía que tenía enfrente a un adversario de mucho nivel -el San Diego, de 25, ocupa el puesto 10 y la semana pasada era el 5-.
Sin embargo, Alcaraz comenzó como suele hacerlo últimamente. Arrebató el saque a Fritz a las primeras de cambio y luego se anotó su servicio para arrancar con 2-0. Taylor logró recortar distancias con muchos apuros en un partido con puntos largos y mucho intercambio de golpes. Y luego tuvo una bola de ruptura en el cuarto juego del set. No obstante, con un saque-volea a bote pronto, CA salió del apuro y luego sumó otros dos puntos para seguir teniendo el mando (3-1).
Con sacar adelante su servicio le valía para llevarse la manga y en eso se aplicó el pupilo de Juan Carlos Ferrero ante un rival que fue elevando el nivel de su tenis. No en vano, el californiano dispuso de otra bola de break, pero el de El Palmar volvió a reaccionar para llegar al 4-2 con un ace.
Taylor, tremendamente decidido, apretó todavía más pero un número 1 lo es porque sabe aguantar también cuando se ve dominado y así Alcaraz logró el 5-3.
El estadounidense, con su saque ganado en blanco, volvió a meter presión y a obligar a Carlos a vencer su quinto servicio para cerrar el set. Dos nuevos aces, el cuarto con segundo servicio y el quinto para anotarse el juego le sirvieron para llevarse la manga inicial después de 45 minutos.
La mitad del trabajo estaba hecho y el arranque del segundo parcial fue similar al del primero. Un Carlos Alcaraz en modo martillo repitió la maniobra y comenzó con break a su favor, éste además en blanco.
A base de derechazos el murciano volvió a dominar con bastante claridad y eso empezó a desesperar a su oponente, consciente de que estaba a merced de Carlos, quien logró el 3-1 en blanco.
Pese a esas sensaciones el norteamericano no se dejó ir y continuó al acecho haciendo bueno su saque. Alcaraz, quien escuchó un ¡Viva Murcia! desde la grada de la pista central del Hard Rock Stadium de Miami, mantuvo la solidez para conservar la ventaja y acercarse a la victoria. Y más aún con la ruptura en el séptimo juego del set, a lo que contribuyó el hecho de que Fritz cometiera dos dobles faltas.
Con 5-2 el palmareño se dispuso a servir para sellar su pase a las semis y se vio que quería acabar con el partido cuanto antes. Su cuarto juego en blanco en el partido y objetivo cumplido tras otros 31 minutos en un choque en el que logró 63 puntos, 15 más que Frtiz.
En menos de 24 horas le espera otro duelo, éste ante Sinner, quien viene de vencer al finlandés Emil Ruusuvuori por un claro 6-3 y 6-1. Contra el de San Cándido, quien a sus 21 años es el undécimo jugador del mundo, se dilucidará el acceso a la final y se prevé una dura batalla en el sexto enfrentamiento entre ambos jugadores y por ahora el bagaje favorece al murciano por tres victorias a dos. En el último precedente, que data de las semifinales del Masters 1.000 de Indian Wells, hace un par de semanas, Carlos se impuso por 7-6 murcia(4) y 6-3.
Alcaraz tratará de repetir y demostrar que sigue fuerte para revalidar título en Miami y mantenerse en la cima del tenis mundial justo cuando Estados Unidos ha levantado las restricciones covid que permitirán al serbio Novak Djokovic, número 2 del ranking, competir en este país pese a no estar vacunado contra el coronavirus. Una buena noticia para el tenis y un estímulo más para el español, a quien ya de por sí le hace falta poco para exigirse el máximo.