ALICANTE. Borja Martínez demandará al Hércules por despido improcedente.
Los abogados del futbolista preparan ya la correspondiente demanda, después de que el club blanquiazul rescindiera unilateralmente el contrato que les unía hasta junio de 2023 al acogerse a una cláusula que estipulaba es posibilidad "en caso de descenso a Tercera División".
Como ya contó Alicante Plaza, la interpretación que hizo el Hércules de la situación no es compartida por la defensa de Borja, que sostiene que los blanquiazules ni han descendido ni van a competir en la 2021/22 en Tercera. El club alega que se ha cumplido el citado supuesto, que no solo se ha descendido, también cabe considerar a la Segunda RFEF como la antigua Tercera. Sin embargo, la parte del jugador entiende lo contrario: que el Hércules no ha descendido porque precisamente ha jugado la 'fase de ascenso' a Primera RFEF (no la 'de descenso', que también la había) y que si va a competir en la jugar en la 2021/22 en el cuarto escalón del fútbol español es porque la Real Federación Española de Fútbol ha creado una categoría por encima de la antes llamada Segunda B, la Primera RFEF.
Jugará en la Primera RFEF
Precisamente el Sanse de la Primera RFEF comunicaba este viernes el fichaje del extremo alicantino por una campaña. El anuncio llegaba horas después de que Borja colgara en las redes sociales una emotiva carta dirigida a la afición blanquiazul en la que calificaba como "muy duras en lo personal y lo colectivo" las dos campañas que ha jugado en el Hércules, pese a lo que aseguraba que no se arrepentía de su decisión de fichar por él: "Volví a casa con la mayor ilusión del mundo (...) me he vaciado por el escudo cada día, cada entrenamiento y cada partido", decía el futbolista en una misiva en la que se mostraba agradecido "a todas y cada una de las personas que componen el club", a la afición (a la que se refería como "exigente", pero a la altura de la entidad) y aseguraba que su marcha "no es un adiós, es un hasta pronto" y que "ninguna persona o circunstancia hará que cambie su sentimiento" por el Hércules.
Borja Martínez se formó como futbolista en el club del Rico Pérez, al que regresó hace ahora dos veranos procedente del Elche, rechazando ofertas que mejoraban la blanquiazul (del Cartagena y el Ibiza). El entonces director deportivo, Javier Portillo, apostó con fuerza por el extremo, pero tras un arranque gris de curso salía cedido al Ibiza en el mercado de invierno. Aunque se anunció que la cesión era por campaña y media, el verano pasado el club balear decidía acogerse a que el Reglamento General de la RFEF solo permite cesiones hasta final de temporada (se pueden encadenar varias, pero no pueden ser por más de un curso) para no seguir contando en la 2020/21 con Borja, que volvió al Hércules para cumplir con el segundo de los cuatro años de duración de su contrato. El montante de este y que el nivel ofrecido por el extremo no fuera el esperado (participó en 18 encuentros oficiales y anotó dos goles en la 2020/21), llevaba al club blanquiazul a ejercer hace una semana la ya famosa cláusula de rescisión. Veremos qué dice la Jurisdicción Social.
