CASTELLÓ. La incorporación de un delantero centro de calidad se ha convertido en la nueva prioridad del Castellón después de cerrar el capítulo defensivo con la adquisición de Rene Krhin. La falta de gol, tan recurrente esta temporada en el conjunto orellut, es un aspecto que la secretaría técnica está tratando de corregir dentro del mercado de jugadores sin equipo.
Sin embargo, el elevado caché económico de este perfil de futbolista dificulta su obtención y abre otras opciones de refuerzo para cubrir la única ficha profesional que tiene el Castellón. Así, el club albinegro también está evaluando centrocampistas ofensivos que estén disponibles y que sean abordables económicamente.
Y es que el conjunto de la Plana no solo tiene problemas para marcar. También los tiene para llegar con claridad al área contraria. De hecho, el Castellón es, hasta ahora, el segundo equipo que menos dispara a puerta en Segunda División, con 55 lanzamientos en 24 partidos disputados.
Por ello, la dirección deportiva del club se abre a la posibilidad de cubrir la ficha profesional que tiene libre con un jugador que ayude a mejorar las prestaciones atacantes del equipo, aunque no sea delantero. Así, la opción de un centrocampista ofensivo está sobre la mesa. Puede ser un mediapunta o un extremo. En todo caso, un jugador que mejore el potencial de los de Garrido en el área contraria.
Esta alternativa podría tomar fuerza en caso de que la llegada del ansiado delantero que marque diferencias sea inasumible para la limitada tesorería del club. El Castellón está recibiendo muchos ofrecimientos de atacantes dispuestos a sumarse a la plantilla, pero hasta ahora ninguno ha convencido a los rectores de la entidad. En cambio, los jugadores que gustan, como Jonathan Soriano, que está sin equipo tras desvincularse del Girona hace seis meses, son inviables para las arcas del club, salvo que rebajen sus exigencias económicas.
La adquisición de un mediapunta o extremo tampoco sería sencilla dadas las limitaciones de mercado, pero supondría una alternativa para dotar al Castellón de más recursos ofensivos. Lo que está claro es que la dirección deportiva tiene intención de recurrir a esta vía para tratar de elevar el nivel del equipo en su lucha por mantenerse en el fútbol profesional.