ALICANTE. El Lleida es el primero en llegar a la vía judicial en su lucha contra la decisión de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) de cancelar por adelantado la Liga regular en el fútbol aficionado.
El conjunto ilerdense anunciaba el viernes que había interpuesto ante los Juzgados Centrales de lo Contencioso-Administrativo un recurso solicitando la nulidad de la resolución del Consejo Superior de Deportes (CSD) del pasado 30 de abril que dejaba en manos de la comisión delegada de la RFEF el destino de la Liga regular en Segunda B suspendida a principios de marzo por culpa de la pandemia de Covid-19.
El Lleida, que ocupaba la quinta plaza a tres puntos del cuarto clasificado cuando lo anterior se produjo, busca que se jueguen las diez jornadas pendientes de la Liga regular y, tras las mismas, los cuatro primeros clasificados jueguen un 'play-off' de ascenso con el formato previsto al inicio de la temporada.
Cautelarísima
Además de la interposición del citado recurso, el club catalán solicitaba también en el juzgado una cautelarísima, la suspensión inmediata del efecto de la decisión emanada de la comisión delegada de la RFEF del 8 de mayo por la que se ratificaba la aprobación de la propuesta para resolver las competiciones no profesionales, debatida y aprobada por la comisión de presidentes territoriales y la Junta Directiva en los días previos, y que establecía "la finalización anticipada de las fases regulares de las competiciones federativas de ámbito estatal sin descensos, así como disputar la fase final o 'play-off', en el caso de haberla, en formato exprés y sin afluencia de público, con un intervalo mínimo de 72 horas entre los partidos, salvo en categorías juveniles donde se da por terminada la temporada y se practican los ascensos".
De ser adoptada por el magistrado competente esa medida provisional de carácter urgente el 'play-off' exprés de ascenso a Segunda A y Segunda B previstos para la semana del 18 al 26 de julio sería suspendidos y tampoco se podría considerar que la Liga se ha cancelado (en Segunda B y Tercera) sin descensos, algo de lo que se beneficiaron el Hércules y el Orihuela que cerraban la tabla en el grupo III, ocupaban dos de las cuatro plazas de descenso, cuando se suspendió la competición.
Obviamente, para ambos clubes lo importante será el destino que corra el recurso contencioso-administrativo interpuesto ya que desgraciadamente no se han clasificado para la fase de ascenso precisamente, pero una cautelarísima que suspendiera la celebración de esta afectaría al inicio de la próxima temporada (ya que resulta harto improbable que la RFEF vaya a dar marcha atrás voluntariamente a su decisión del 8 de mayo y opte por terminar jugando la temporada 2019/20).