ALICANTE. El Elche ha cambiado de manos. No es la primera vez que ocurre en sus casi 100 años de historia pero sí que nunca hasta la fecha el control del club, de la sociedad anónima deportiva desde que la entidad del Manuel Martínez Valero adoptó esa forma jurídica, había estado en manos no ya extranjeras, también ajenas a la ciudad.
Christian Bragarnik, 'el dueño de la pelota' como se le apoda en su país de origen, en Argentina, cerraba este martes con José Sepulcre la compra del paquete de acciones de Tenama Inversionesy pasaba a ser titular del 70% del capital social del Elche. Según el comunicado en el que se oficializaba la operación, Bragarnik es la cabeza visible de la sociedad limitada Score Club 2019, que no es otra cosa que la filial española de Score Fútbol, la agencia a través de la que articula su negocio de representación de futbolistas como Darío Benedetto, Iván Marcone, Brian Fernández, Víctor Cuesta o Franco Jara y de entrenadores entre los que se encuentran Diego Armando Maradona, Diego Cocca o Jorge Almirón. Ni el empresario argentino ni Sepulcre quisieron ofrecer datos concretos del acuerdo: "Es un tema privado de un accionista del Elche", respondía tajante el expresidente al que escribe cuando le preguntaba por los detalles de una compraventa cuyo precio rondaría los 18 millones de euros, pagaderos a plazos y de manera condicionada a diferentes cuestiones que van desde los resultados deportivos al destino final de los diferentes litigios que mantiene el Elche abiertos a día de hoy y entre los que destaca el iniciado contra la reclamación millonaria que mantiene la Comisión Europea contra él.
Poco después de las siete de la tarde, entre una nube de periodistas y con un visible gesto de cansancio, Bragarnik y Sepulcre abandonaban la notaría de la avenida de la Comunitat Valenciana en la que tras una larga jornada habían culminado una operación de venta que un día antes estaba encarrilada pero no cerrada: aunque la negociación se extendía ya por más de tres meses, parece que este martes todavía restaban cuestiones a resolver y no menores (algunas versiones que ya circulan apuntan a diferencias de última hora y no solo entre comprador y vendedor). En cualquier caso, las partes sellaron con un apretón de manos y su firma un acuerdo que supone un antes y un después para el Elche que queda ahora bajo el control de un hombre hecho a sí mismo, nacido en 1971 en el bonaerense barrio de Flores, donde se encontraba el videoclub que regentaba hace 20 años cuando llevó a término su primer traspaso de un futbolista y que ahora tiene su base de operaciones en un lujoso despacho radicado también en Buenos Aires pero en un barrio bien distinto, el exclusivo Puerto Madero.
Los socios de Bragarnik
Bragarnik, escoltado entre otros por uno de sus socios, el abogado Ricardo Pini, se esforzó en transmitir un mensaje de tranquilidad al entorno franjiverde al señalar que su hoja de ruta persigue "tratar de dar continuidad al buen trabajo que ha realizado Pepe todos estos años, seguir dándole estabilidad al club y llevarlo donde merece"; para esto último parece claro que uno de los caminos a emprender es el de los fichajes, algo por lo que también se le interpelaba, respondiendo el argentino que los pasos a dar en ese sentido iban a depender del cuerpo técnico".
Bragarnik ha asistido a no pocos partidos del Elche en lo que llevamos de curso; en uno de ellos, el que enfrentó a los franjiverdes al Lugo, estuvo acompañado por el presidente en funciones de Boca Juniors, Daniel Angelici, que esta semana pone fin a su etapa en el cargo coincidiendo con las elecciones a la presidencia del club. Ese proceso electoral que está a punto de culminar (Angelici no se presenta como tal (no puede), pero sí hay una candidatura 'oficialista') va a hacer que Bragarnik regrese ya a Argentina, si bien no tardará en volver pues no solo el mercado de invierno está a la vuelta de la esquina, es que el día 30 ha de dar el visto bueno con su voto (puede hacerlo por medio de un representante, pero eso no tendría mucho sentido tratándose de su primera Junta de Accionistas en el Elche) a una operación acordeón en la que, para empezar, las acciones que compraba este martes pasarán de tener un valor nominal de 3,20 euros a uno de 0,04.
Además de Angelici, otro de los socios capitalistas de Bragarnik es Jorge Hank, un empresario y político mexicano propietario a través del Grupo Caliente de los clubes Xolos de Tijuana, Dorados de Sinaloa (en el que precisamente militaba, Danilo Ortiz antes de recalar en el Elche de la mano del empresario argentino y su amigo Pedro Aldave, representante del futbolista paraguayo) y curiosamente desde este martes el Gallos Blancos de Querétaro (del que en su día fue presidente Bragarnik).
Hank y Angelici no solo tienen en común (junto con Bragarnik) su vinculación directa con el mundo del fútbol, también invierten ambos en otros sectores como el del juego y las apuestas.
La cercanía del mercado de fichajes
La citada operación acordeón (una reducción de capital seguida de dos ampliaciones (una por compensación de créditos y otra por aportaciones dinerarias), parecía que iba a llevar a los protagonistas a posponer la formalización de la venta, sin embargo la necesidad de seguir inyectando liquidez para que la Liga de Fútbol Profesional autorice fichajes en la ventana de enero ha terminado precipitándolo todo y es que Sepulcre no ha escondido en ningún momento su cansancio en ese aspecto; de hecho, aunque él lo ha desmentido por activa y por pasiva, desde amplios sectores se sigue apuntando a que parte del auxilio financiero prestado por el expresidente el pasado verano para que el Elche pudiera inscribir jugadores ya tuvo realmente su origen en Bragarnik. De haber sido así, se entiende aún más sus ganas de entregar las llaves de una entidad en la que ha tenido que inyectar en los últimos ejercicios una suma que excede la que supuestamente va a recibir ahora.
Organigrama y consejo
El cambio en la propiedad abre ahora un periodo de cierta incertidumbre sobre qué ocurrirá con algunos de los ejecutivos fichados por Sepulcre meses atrás para ayudarle a desarrollar un plan que tenía como objetivo hacer la entidad rentable al tiempo que devolverla a Primera División en cuatro o cinco temporadas. Estamos hablando de Patricia y Nico Rodríguez, directora general y director deportivo respectivamente. La primera es además integrante de un consejo de administración cuyo presidente, Joaquín Buitrago, dejaba entrever que precisamente el 30 de diciembre sufrirá cambios como consecuencia de la venta del paquete accionarial mayoritario. El también abogado de Sepulcre estuvo junto a él y Antonio Rocamora, socio del expresidente en Tenama (es titular del 34% de las acciones de esta mercantil), durante toda la negociación y especialmente este martes.
