Un vuelo firme, consistente, brillante hacia la plata paralímpica. Una medalla, la 35 para España, en la antesala de la Clausura de los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020. Otra presea, además, en clave Comunitat Valenciana, con etiqueta Proyecto FER. La logró el alicantino Ivan Cano: "Estoy entre dolorido y entusiasmado. Todavía no me lo creo. Estar por primera vez en unos Juegos Paralímpicos, esperar hasta uno de los últimos días para competir e igualar mi mejor marca personal… He podido dar mi mejor versión y la lástima es no haber saltado un poco más, pero seguro que hay otras oportunidades".
El saltador de longitud, de 26 años, graduado en Ingeniería de Telecomunicaciones, que actualmente cursa el Grado en Física, se marcó como objetivo para 2021 ser medallista paralímpico. Cano entró con confianza al Estadio Olímpico de Tokio con la segunda mejor marca personal de los finalistas en salto de longitud (clase T13 - discapacidad visual) con 7,04 metros, logrados en el Mundial de Dubái en 2019, donde consiguió la medalla de bronce.
El alicantino se fue al pasillo ambicioso en cada tentativa. Escuchó cada indicación. Y se fue a por el mejor vuelo posible. Iván consiguió igualar su mejor registro personal con 7,04 metros en el primer salto en el estadio tokiota. Lo dicho, a la primera. No consiguió la mejora. Y tuvo que renunciar al último salto por las molestias que notó en la quinta tentativa. Pero para Iván Cano era suficiente ese 7,04 para segurarse el podio y subir al escalón de plata.
El oro fue para el azerbaiyano Orkhan Aslanov (7,36, nuevo récord de Europa) y el bronce para el estadounidense Isaac Jean-Paul (6,93).
El saltador alicantino escribió un nuevo éxito en su trayectoria deportiva, que suma ya cuatro medallas internacionales en salto de longitud: oro en el Europeo de Berlín 2018, bronce en el Mundial de Dubái 2019, plata en el Europeo de Bydgoszcz el pasado mes de junio y plata en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020.
En la jornada de atletismo, además, el Equipo Paralímpico Español celebró otra presea con la firma de la atleta Adiaratou Iglesias, que se proclamó subcampeona paralímpica de los 400 metros, con lo que sumó dos medallas en su debut en unos Juegos Paralímpicos después de que el pasado martes consiguiera el oro en los 100 metros.
Además, Desirée Vila (clase T63, atletas con discapacidad física) hizo su mejor marca personal con 16"84 en la ronda clasificatoria de los 100 metros, pero no bastó para clasificarse para la final.
Un salto de 6,75 metros entregó al atleta alicantino la medalla de plata, el mismo metal que consiguió en los pasados Campeonatos de Europa de Swansea