CASTELLÓ. Los jugadores del Castellón inician sus vacaciones de fin de año tras vencer con solvencia al Cornellà y no volverán a entrenar hasta la tarde del domingo, 29 de diciembre.
Los hombres de Óscar Cano podrán saborear los turrones con buena cara tras el nivel exhibido en los cuatro meses que se llevan jugados esta temporada, y también recargar baterías después del esfuerzo realizado.
A su vuelta, empezarán a preparar el partido ante el Lleida, rival directo en la pelea por arriba, y con el que cerrarán la primera vuelta. Ese encuentro tendrá lugar el domingo, 5 de enero, en el Camp d'Esports.
Para ese compromiso, el técnico orellut espera tener recuperado a Rubén Díez, uno de los más destacados de la plantilla, que se recupera de una artroscopia que le fue practicada hace dos semanas para curar unas molestias que venía sufriendo en su rodilla izquierda.