Peter Lim recaba información antes de tomar decisiones

VALÈNCIA. El máximo accionista del Valencia, Peter Lim, tiene previsto, según fuentes del club, tomar decisiones importantes en las próximas fechas que afectan al funcionamiento de la entidad en diferentes escenarios. Los contextos deportivo, económico y estructural serán tratados en la reunión que mantengan Lim y su presidente en el club, Anil Murthy, en las próximas fechas.

Pese a que Lim y Murthy ya han establecido contacto telefónico, los dos se han emplazado para una reunión cara a cara que mantendrán en el momento el segundo finalice su confinamiento de dos semanas en Singapur, siguiendo el protocolo que marca la sanidad de aquel país.

Sobre la mesa varios asuntos a tratar. El asunto deportivo, que afecta a la continuidad del entrenador, ha vuelto a reabrirse tras la derrota en Valdebebas y, sobre todo, por la imagen tan pobre que dio el equipo. Desde su confinamiento en Singapur, Murthy ha mantenido varias charlas, vía telemática, en los últimos días para conocer los puntos de vista de todos los implicados en el día a día del vestuario. El martes habló con Gracia para preguntarle qué sucede con el equipo que no abandona los puestos de descenso de la clasificación. Un día más tarde, el miércoles, dialogó con los capitanes para conocer cómo respira el vestuario respecto a los métodos del entrenador y cuál es la percepción del grupo sobre el mal rendimiento en el terreno de juego.

En esa reunión estuvo presente el secretario técnico, Miguel Ángel Corona, que aconsejó a Murthy el fichaje de Gracia. Los dos técnicos se han distanciado en las últimas fechas por la política de recortes y de fichajes de la entidad durante el pasado verano, que contrariaron al entrenador. No se descarta que el presidente le haya pedido opinión a Corona respecto a qué medidas tienen que tomarse con Gracia.

La postura que desliza el club sobre la continuidad del preparador navarro es la misma que en la anterior crisis que afectó al banquillo. No hay dudas respecto al técnico. Esa es la versión oficial. La solución es que el equipo gane partidos y empiece superando al Celta este sábado. Pero las consultas efectuadas por Murthy sobre el estado del vestuario son llamativas porque el presidente está en Singapur y su reunión con Lim es inminente. ¿Y si no se gana el Celta? Confiamos en que llegue una victoria, mantienen en el club.

La crisis del banquillo es una calle sin salida. La situación económica es calcada a la de hace unos meses, cuando el club tras el empate ante el Cádiz se planteó destituir al entrenador, pero dio marcha atrás porque el despido era muy gravoso para la tesorería de la institución. Despedir hoy al técnico cuesta lo mismo, tres millones de euros. Y el club no se lo puede permitir. La clasificación del equipo, colgando de la tabla cerca del descenso, aconseja un cambio, pero la economía del club no lo permite. Mientras, pasan las jornadas y el equipo no se escapa de la amenaza del descenso, sigue sin encontrar una identidad, y numerosos jugadores marcan un rendimiento inferior al que están capacitados para dar.

El estadio y el plan

Otro asunto a debate en Singapur es el de las parcelas de Mestalla y el reinicio de las obras en el estadio de la avenida de las Cortes Valencianas. La versión oficial, la que traslada la gente de Meriton en Valencia, es que Murthy tiene un plan. Hay una reunión prevista con el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que se realizará a la vuelta de Murthy desde Singapur. El plan más bien es de Peter Lim.

Según informó Superdeporte, el empresario singapurense tiene la intención de poner en marcha las obras y finalizar el estadio sin pasar por la casilla de salida de vender, previamente, las parcelas del viejo Mestalla. Ante la falta de ofertas convincentes por las parcelas y empujados por la presión que ejercen las autoridades de la ciudad -sobre todo desde el ayuntamiento- para cumplir con la ATE antes del 15 de mayo, Lim estudia financiar las obras con un crédito de un entidad bancaria que avalaría personalmente. La desconfianza, basada en anteriores promesas insustanciales, acompaña este posible movimiento del propietario del que es normal recelar.

La venta del club

Esa opción no se debatirá en Singapur. Meriton mantiene una postura de total incredulidad respecto a las informaciones que sostienen que en la ciudad se están cociendo diferentes movimientos de posibles compradores para la entidad. Los empleados de Lim en la ciudad argumentan que para que se dé una venta debe existir, previamente, una voluntad de vender que hoy no existe. Defienden que Peter Lim está muy lejos de vender el Valencia e ironizan sobre la capacidad económica de los supuestos compradores.

En su argumentario sostienen, además, que nadie les puede obligar a vender mientras cumplan con sus obligaciones.

Los pagos de junio

El Valencia, obligado a vender este verano, como advierten las cifras que publicó en la Junta General de accionistas, por 26,4 millones de euros antes del 30 de junio, pondrá de nuevo a varios activos de su plantilla en el mercado. En Singapur se determinará qué jugadores poner en el mercado. Kang In, que se resiste a renovar será uno de ellos. El resto lo determinará el mercado, que se prevé, de nuevo, a la baja, lo que dificulta las expectativas de venta de Lim.

Gonçalo Guedes es un activo que preocupa a Meriton. Su rendimiento es decepcionante, se ha devaluado y, lo que es más preocupante, todavía no está amortizado. El próximo verano al Valencia CF le quedarán 20 millones de euros por amortizar de los 40 millones que costó su fichaje. Si el club consigue venderlo, un porcentaje de la operación, entre un 15 y un 20%, serían para el París Saint-Germain.

Lim, que posee los derechos federativos de ocho jugadores de la plantilla como garantía para cobrar las dos líneas de crédito que concedió al club; la primera por un importe de 100 millones de euros, del que todavía están pendientes 38, y la segunda por 16,5 millones, podría decidir vender activos, esto es, jugadores, para recuperar su dinero.

Los 38 millones de euros pendientes de pago de la línea de crédito de 100 millones que prestó Peter Lim vencen en varios plazos desde diciembre de 2020 hasta septiembre de 2021 (15 millones el 30 de junio de 2021 y el resto antes en septiembre) y los 16,5 millones que ha prestado al Valencia recientemente, vencerán en septiembre de 2021. Es decir, el próximo 30 de junio el club tiene que pagarle al máximo accionista 15 millones. Y en las mismas fechas, 12,9 millones a Bankia, además de hacer frente a la obligación de ingresar 26,4 millones en venta de activos.