VALÈNCIA. El estadio Giuseppe Meazza, San Siro, dónde el Valencia CF ha vivido dos de sus peores nnoches europeas, podría bajar el telón definitivo, el derribo planea sobre él.
En el recuerdo de los aficionados blanquinegros, dos fotos negras en la historia del club, posiblemente la más dolorosa de los más de 100 años de vida, la final de la Liga de Campeones de la temporada 2000-2001 ante el Bayern de Munich, y la otra, el partido ante el Atalanta de esta misma temporada, que además de la derrota, fue una 'bomba bacteriológica' de covid-19.
El veredicto lo dio recientemente la Comisión regional para el patrimonio cultural de Lombardía (norte) en un documento en el que se asegura que ya no quedan restos suficientes del San Siro originario para que se considere un bien de interés cultural para la ciudad.
"El estadio Giuseppe Meazza no presenta interés cultural y por lo tanto está excluido de las disposiciones de tutela por esta razón: se trata, en este momento, de una estructura arquitectónica en la que los restos del estadio originario de 1925-1926 y la ampliación de 1937-1939 son residuales con respecto a las siguientes intervenciones de adecuación y ampliación, realizadas en la segunda mitad de 1900", se lee en el documento firmado por la Comisión regional lombarda.
El estudio fue realizado a petición del alcalde de Milán, Giuseppe Sala, quien está trabajando junto al Milan y al Inter en unos proyectos para edificar un nuevo estadio, más moderno, en la misma zona en la que surge el coliseo actual.