Afición, liderazgo y exigencia: Baraja marca la hoja de ruta para la salvación

VALÈNCIA. Rubén Baraja se sentará el lunes en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe con la misión de salvar al Valencia CF del precipicio de la Segunda división, con 17 partidos por delante y con una plantilla que necesita un impulso desde el banquillo que no ha tenido con la figura de Voro. 

El vallisoletano marcó la hoja de ruta en su presentación como nuevo entrenador del Valencia CF y lo tuvo muy claro de principio a fin: afición, liderazgo y exigencia deben marcan el camino para certificar la permanencia en Primera división.. 

La afición a la que ahora "no están en posición de pedirle nada" pero a la que necesitan: "me gustaría tener a Mestalla detrás, que la gente ahora no hiciera manifestaciones pero eso no me compete. Yo me siento valencianista y creo que el equipo necesita a la afición pero entiendo que se manifiesten de la manera que crean oportuno, habrá gente que esté de acuerdo y otra que no. Necesitamos a la afición, es una realidad. Quiero que mis jugadores sientan lo que yo sentí siendo jugador del Valencia CF". 

Mestalla dictará sentencia el próximo sábado 25 de febrero, cuando el Valencia CF reciba a la Real Sociedad, en el primer encuentro de Baraja y Marchena en el banquillo de Mestalla, en el que tantas veces han defendido el escudo del club desde dentro del césped. 

Las potentes imágenes del pasado sábado ante el Athletic Club, que dieron la vuelta al mundo, podrían quedarse en 'stand-by' si la afición se une al discurso de Baraja pese a la crítica situación de la entidad.

Con esto, el excentrocampista que lució brazalete en una de las épocas más gloriosas de un club centenario como lo es el Valencia CF también sabe cual es la clave dentro del vestuario, lo primero es abrir los ojos con la situación y luego que los jugadores sepan que "no pueden descender al Valencia CF". 

"El Valencia es un club muy grande, estamos pasando en una situación complicada y los jugadores tienen que sentir esa exigencia de jugar en el Valencia, no me sirve de nada la juventud, ni que no sabía que íbamos a estar en esta situación, hay que asumirlo... este club tiene una exigencia muy alta, tengo que exigir porque la historia del club es la que es y se ha ganado con muchos años", dijo el técnico en su presentación, que sabe bien lo que es la exigencia de un club en el que durante unos años había que ganar todos los partidos y en los que se consiguieron muchos trofeos. 

"Para mí es vital transmitir exigencia, estamos en el Valencia y aquí hay unas premisas y unos valores, un día a día que tiene que ser innegociable", algo que esta plantilla no tiene interiorizado, algo que Gattuso pedía cuando hablaba de pensar en el fútbol las 24 horas del día y que no llegó a meter en las cabezas de los jugadores. 

El liderazgo lo volverán a poner dos de los grandes capitanes de la historia del club, Rubén Baraja y Carlos Marchena, pero ésta vez lo harán desde fuera, desde la banda, y será vital que los jugadores capten el mensaje desde el inicio: "necesitan asentarse y encontrar un liderazgo, quiero explicarles lo que yo creo y trabajar e insistir.  Los veo con buena sintonía, los tres capitanes me mandan un mensaje positivo, que el equipo quiere, que hay buena predisposición, ellos tienen que sentir lo importante que es jugar en el Valencia, que es un club muy grande".