El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha lamentado que el Real Madrid no haya estado "a la altura de las circunstancias" en relación a la suspensión del partido del domingo contra el Celta en Balaídos
VALENCIA. El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha lamentado hoy que el Real Madrid no haya estado "a la altura de las circunstancias" en relación a la suspensión del partido del domingo contra el Celta en Balaídos, por cuanto "cuando se habla de seguridad, no se discute", ha argumentado.
Caballero ha atacado en rueda de prensa al Real Madrid por ejercer "presión a través de los medios" y por utilizar "mecanismos impropios de un club de fútbol para tratar de jugar ese partido, que era imposible por cuestiones de seguridad".
Ha dicho que esperaba que la entidad blanca "cooperase" ante la decisión que tomó de aplazar el encuentro por los desperfectos causados por el temporal en la grada de Río, cuyos trabajos de reparación comenzarán hoy con vistas a recibir al Shakhtar en la eliminatoria de la Europa League "con el 100% de seguridad".
"No sé si estarán enfadados porque los eliminamos de la Copa", ha dicho Caballero con sorna, para a continuación recuperar la solemnidad y proclamar que "cuando se habla de seguridad no conviene discutir nunca".
Ha hecho hincapié en que el partido entre el Deportivo y el Betis se suspendió por las mismas razones "y no se discutió", pero en Vigo, "como jugaba el Madrid, se desataron todas las iras del universo".
Sobre el comunicado emitido anoche por el Real Madrid, en el que le acusa de pronunciar afirmaciones "rotundamente falsas" respecto a las medidas de seguridad en Balaídos, Caballero se ha reafirmado en que lo que dijo es "absolutamente cierto".
Se ha preguntado "cómo se interpreta si no" que, conocedor del informe municipal que avalaba el aplazamiento del partido, el Real Madrid mantenga que se pudo haber cerrado la grada de Río, cuando una de las planchas que se soltó con el viento cayó sobre el terreno de juego, o que se pudieron arreglar los desperfectos cuando "si alguien subía, corría peligro su vida".
"En esta ciudad, las decisiones de seguridad las toma el alcalde y no el Real Madrid", ha zanjado.