MURCIA. Carlos Alcaraz Garfia sigue paseando con honores por todo el mundo el nombre de Murcia y se ha proclamado campeón de las Next Gen ATP Finals al vencer en tres sets por 4-3 (5), 4-2 y 4-2 en 1 hora y 21 minutos de juego al estadounidense Sebastian Korda, quien se ha rendido a la superioridad mostrada por el joven tenista murciano, de 18 años y número 32 del mundo, ganador del torneo que reúne a las mejores raquetas de hasta 21 años del panorama del planeta.
La final era la prueba más dura para Alcaraz en la pista rápida del Allianz Cloud de la ciudad italiana de Milán y a ella llegaron los dos aspirantes invictos después de cuatro partidos.
Korda, de 21 años y que ocupa el puesto 39 de la ATP, no iba a ser rival fácil, eso estaba claro, pero la exhibición de madurez del español le llevó al triunfo rindiendo al mejor nivel cuando más exigido estuvo.
Para empezar ya salvó un 15-40 sacando en el primer juego del partido y luego, con 1-1, volvió a evitar el "break" en su contra cuando su rival tuvo dos bolas de ruptura y lo hizo encadenando dos "aces".
En el quinto juego Alcaraz también se sobrepuso a un 0-30 adverso y demostró que en los puntos decisivos está claramente a la altura.
Korda, por su parte, iba ganando con bastante más solvencia sus servicios y eso hizo que la primera manga se resolviera en el "tie break". Ahí, tras ir mandando por 4-2 y después verse 4-5 abajo, el español se sobrepuso y se anotó tres puntos seguidos para ganar la muerte súbita por 7-5 con el último con una volea.
Tras los 31 minutos que duró el set y habiendo soportado bien la presión, Alcaraz fue a remolque de su rival también en la segunda manga porque éste sirvió primero y continuó haciéndolo con seguridad. No obstante, el pupilo de Juan Carlos Ferrero mejoró echando la bola al aire y eso le llevó a igualar a 1 y a 2 y, en el quinto juego de este parcial, aprovechó el más mínimo resquicio para volver a decantar la balanza a su favor. Lo hizo haciendo buena la segunda bola de "break" que tuvo en la final.
El palmareño sacaba para ganar también el segundo set y no falló. Lo ganó después de 24 minutos con otro "ace", su cuarto en el partido y que obtuvo golpeando la pelota amarilla a 218 kilómetros por hora.
Aunque con apuros, cada tenista fue sacando adelante su servicio en el arranque de la tercera manga hasta que Alcaraz, a quien su entrenador le pedía intensidad desde la grada -como si se pudiera ser mucho más intenso-, mostró que iba directo a la victoria. Otra ruptura para el 2-1 y el refrendo en el siguiente juego para quedarse al borde del título.
"La Roca" desperdició dos bolas de campeonato al resto, pero dijo hasta aquí ya sirviendo. Pese a verse 0-30 en contra reaccionó como lo suele hacer y acabó con un "smatch" inapelable tras otros 26 minutos.
La estadística de la final habla del equilibrio que la presidió -62 puntos españoles por 56 de los de Florida- y un dato concluyente, el murciano salvó las seis bolas de ruptura que tuvo su oponente y aprovechó dos de las seis que se le presentaron a él, lo que habla de su fortaleza mental, al margen de su condición física y las virtudes técnicas que tiene con la raqueta en la mano derecha.
Fue la constatación de un tenista que seguirá dando muchísimo que hablar y que en Milán se llevó el trofeo venciendo sucesivamente al danés Holger Vitus Nodskov Rune por 4-3 (6), 4-2 y 4-0; al estadounidense Brandon Nakashima por 4-3 (4), 4-1 y 4-3 (4); y a los argentinos Juan Manuel Cerundolo por 4-0, 4-1, 2-4 y 4-3 (3) y Sebastián Baez por 4-2, 4-1 y 4-2 y ya a Korda, todo ello con Carlitos cediendo un solo set.