VALENCIA. El español Fernando Alonso (McLaren Honda) augura "una carrera complicada" este domingo en el circuito de Suzuka al haber recibido una penalización de 35 puestos por un cambio de motor, lo que le relegará al último lugar de la parrilla de salida en el Gran Premio de Japón de Fórmula Uno.
Décimo en la sesión de calificación de este sábado, Fernando Alonso acogió con resignación la sanción que conlleva la sustitución de múltiples elementos de la unidad de potencia de su monoplaza.
Los mecánicos detectaron tras la segunda sesión de entrenamientos libres de ayer, viernes, "una fuga hidráulica" y, según recoge este sábado la web de la Fórmula Uno, debieron cambiar varias piezas.
Así, Fernando Alonso utilizará "su octavo motor de combustión interna, su décimo turbo, su décimo MGU-H, su octavo MGU-K, su séptima batería y su sexta unidad de control electrónico" del curso, lo que implica una sanción de 35 puestos en la parrilla de salida.
"No estaba planeado. El motor solo había hecho la carrera de Malasia", explicó el asturiano, dos veces campeón del mundo de la disciplina, en declaraciones a Movistar F1.
Tener que salir desde el último lugar cambia "un poco" sus planes, ya que aspiraba a finalizar en los puntos. "Va a ser complicado ir detrás de dieciocho o diecinueve coches", señaló.
Esa situación hace que el ovetense, de 36 años, se plantee apostar por "una estrategia algo diferente" a la de sus rivales.