El centrocampista del Valencia no brilló como lo hiciera en el primer encuentro en una Portugal que se jugará el pase a la siguiente fase en el último encuentro ante Hungría
VALENCIA. André Gomes se enredó en una inefectiva Portugal. El centrocampista portugués perdió el protagonismo ganado en el primer encuentro y no estuvo tan acertado como hiciera ante Islandia, donde dio una gran asistencia de gol.
En el primer acto la historia pudo ser similiar, y con los mismos protagonistas, pero en esta ocasión el cabezazo de Nani se estrelló en el palo de la meta de Austria en una de las múltiples ocasiones desperdiciadas por el combinado luso en el encuentro.
El propio André Gomes reconoció al finalizar el encuentro la decepción al no haber conseguido la victoria y tener que jugarse el pase a la siguiente fase en la última jornada, donde se medirán a Hungría. "No esperábamos esta situación pero vamos a motivarnos más de cara al próximo partido, una final, con la convicción de que vamos a vencer".
Y es que la Eurocopa no está siendo el camino esperado por Portugal, que llegaba con gran entusiasmo a la cita de Francia. El grupo, además, se mostraba 'fácil' de cara a lograr confianza con victorias para afrontar la fase de eliminatorias, pero nada más lejos de la realidad.
Portugal se ha encontrado con la pólvora mojada en el torneo y frente a Islanda e Austria únicamente ha sido capaz de anotar un gol, algo impensable por el potencial ofensivo del combinado luso, especialmente contando con Cristiano Ronaldo, uno de los goleadores más importantes del contienente que no ha sido capaz de marcar ni de penalti, una de sus grande especialidades.
Portugal varió el sistema tras el primer choque y André Gomes lo notó. Pese a que en el primer encuentro partió pegado a la banda, el atacante del Valencia participó más en el juego combinativo y en la zona peligrosa del campo. De sus botas nació el único gol de Portugal en la Euro tras una gran combinación por la banda.
En este segundo encuentro partió desde el centro del campo pero estuvo lejos de la zona de peligro, ayudando más en la creación del juego más que en la zona decisiva del campo, a la cual si llegó en el segundo acto, pero sin excesiva influencia.
Portugal ahora se jugará la vida en la Eurcopa ante Hungría en el último partido del grupo, una nueva oportunidad para que André Gomes y los suyos puedan seguir soñando con alcanzar los puestos de éxitos.