CASTELLÓ. Con la salida de Jordi Bruixola, el Castellón inicia la reestructuración profunda que había anunciado su presidente, Vicente Montesinos. El director general de la entidad de la Plana deja voluntariamente su cargo en el cambio más importante producido en el organigrama del club desde la llegada de Capital Albinegro. Bruixola abandonará en los próximos días el club orellut para ejercer la misma función en el Burgos, club que milita en Segunda División.
La marcha del dirigente valenciano, adelantada por el Periódico Mediterráneo, no ha sido oficializada aún por la entidad albinegra, pero fuentes cercanas a la misma han confirmado a Castellón Plaza que se producirá. Su adiós se formalizará pocos meses después de haber puesto su cargo a disposición del club. En su nuevo destino trabajará bajo el mando del grupo japonés Septeni Holdings, que aterriza en la entidad castellana de la mano del ex futbolista internacional David Villa.
Bruixola fue uno de los promotores de la incorporación del grupo accionarial que lleva las riendas de la entidad en la actualidad y ha sido el hombre fuerte del Castellón desde su llegada, ejerciendo un control en todas las parcelas del club.
Montesinos: "Si se llega a un acuerdo, el inversor tomará sus decisiones"
Entre sus logros destaca la creación de una estructura de comunicación y marketing que ha permitido llegar mejor a los aficionados en los primeros años de mandato de Vicente Montesinos, consiguiendo que se batieran récords de abonados en Tercera y Segunda División B. En lo deportivo también le avalan los dos ascensos, obtenidos en 2018 y 2020.
Pero también ha tenido sus desaciertos, sobre todo en los últimos años. Los errores en la planificación de la temporada 2020/21, con el Castellón en Segunda División, y su decisión personal de incorporar en el banquillo a Juan Carlos Garrido, en contra de la opinión de la secretaría técnica del club, fueron lastres importantes para un equipo que acabó descendiendo.
Asimismo, Bruixola tampoco ha logrado controlar el déficit de la entidad, que sigue aumentando pese a los ingresos obtenidos en su año de militancia en el fútbol profesional.
La marcha del que ha sido durante cinco años director general del Castellón se produce coincidiendo con las negociaciones que mantiene Montesinos para la incorporación de un inversor. La llegada de este socio, en caso de producirse, provocará transformaciones importantes en todas las parcelas del club, tal como reconoció hace unas semanas el presidente albinegro. Por lo pronto, ya se ha producido un cambio de peso con el adiós de Bruixola.