VALÈNCIA. Julián Calero sale contento de Orriols tras el triunfo frente al Deportivo de la Coruña. Por la victoria y porque, de paso, evita que "cayera la nube negra de pesimismo en la entidad". "Si hubiéramos perdido, hubiera caído, y no es real. Porque hacemos muchas cosas bien", ha comentado el técnico de Parla, que hubiese visto "un gran palo del fútbol" que el Depor hubiese acabado empatando en el descuento.
Era importante ganar porque hay diferentes momentos en las temporadas, y esto acaba de empezar. Pero no quería que cayera de nuevo la nube negra del pesimismo en la entidad. Si hubiéramos perdido, hubiera caído, y no es real. Porque hacemos muchas cosas bien. Hoy, en la segunda parte le faltaba refresco al equipo, pero no había por dónde dárselo. Luego, tenemos un problema con las 'fichas B'. No he podido hacer todos los cambios por no incurrir en alineación indebida. Tienes que estar cuidando todo al detalle, pero nos viene bien esta victoria para el entorno, para el equipo y para la afición.
Se me han hecho largos. Iba el partido para acabar ciertamente cómodo, aunque por no poder meter refresco en el medio ya sabía que podía acabar con sufrimiento. Y ha sido un sufrimiento a base de que han llenado el área y en esas circunstancias pueden pasar cosas. Me hubiera parecido un palo fuerte del fútbol que hoy no hubiéramos ganado.
Le he dicho que fuera ambicioso, que no se conforme con un gol. Quería que siguiera y afortuadamente le ha venido bien el segundo gol. Lo ha podido meter Pablo pero ha decidido no tocarlo ante la duda de estar en fuera de juego. El equipo está unido y esto lo demuestra. Podremos ser mejores o peores, esto es muy opinable, pero el vestuario está comprometido, y son buenos chicos. Cada día es una batalla para nosotros, a veces perdemos y a veces ganamos, pero disfrutamos todos los partidos.
Es un buen jugador. Está minusvalorado. Tiene muchas cosas: combina muy bien, tiene llegada, tiene buen último pase, buen balón parado... Y encima es capaz de sacrificarse. Es un buen jugador que viene de una lesión de tres-cuatro meses. Nos va a dar muchas cosas. Viendo al Lozano de hoy, estoy muy contento. Se lo he dicho al descanso. Le he dicho que estaba muy bien pero que había que seguir jugando así, con el mismo compromiso y la misma dedicación. El fútbol lo tiene, donde tiene que mejorar es en otras facetas. Estaba frito, al final. Hubiera sido un cambio seguro, si hubiera podido. Iba con el gancho. Lógico, porque no había jugado 90 minutos en toda la temporada.
En casa tienes que ser fuerte, sea cual sea el objetivo que te propongas. Necesitamos hacer de nuestro estadio un lugar fuerte. No vas a ganar todo, pero tienes que sentirte cómodo con tu gente. Hemos ganado tres y empatado dos en el Ciutat, pero en esos dos también fuimos merecedores de haber podido ganar el partido. Teniendo esos números, hace falta mejorar fuera de casa, volver a los números del principio. Estamos peleando con los mejores tras las once primeras jornadas, y tenemos capacidad para seguir haciéndolo. Tenemos que tener un estilo propio y seguir creyendo en él. Como hoy.
Entiendo que llegará a Granada. La musculatura estaba agotada y cualquier esfuerzo que haces se te sube el gemelo, isquios, hasta los dientes, los ojos... Todo. Marcos aún llega un poco justo a los finales de partido. Es joven y eso te hace, a veces, no calcular bien. El cambio era Xavi Grande por Marcos, pero al pedirnos Pablo el cambio me dejó la duda de meter a otro jugador con ficha B. No nos arriesgamos a hacer el cambio porque si nos expulsaban a alguien de primer equipo, era alineación indebida.
El equipo está peleando y se está agarrando a todo lo que puede. Me ha encantado el final del público, porque sabe las circustancias en las que estamos y nos ha empujado a conseguir la victoria. Nos ha dado el aliento que nos faltaba. El equipo se agarra a la competición, pero nos hacen falta los efectivos. Ahora llegaría momento de rotaciones, pero vamos a ver. Vamos a intentar recuperar bien para ponerselo difícil.