La UEFA abrirá una nueva etapa con la elección del esloveno Aleksander Ceferin o el holandés Michel Van Praag como presidente, después de casi un año "en la nevera" por la inhabilitación de Michel Platini
VALENCIA. La UEFA abrirá una nueva etapa con la elección del esloveno Aleksander Ceferin o el holandés Michel Van Praag como presidente, después de casi un año "en la nevera" por la inhabilitación de Michel Platini que dirigía la organización desde 2007 y se vio salpicado por el escándalo de corrupción de la FIFA.
El triple Balón de Oro será uno de los nombres propios del duodécimo Congreso Extraordinario, ya que pese a tener una inhabilitación de seis años por incumplir el código ético de la FIFA, ésta ha permitido que el francés intervenga para despedirse de las 55 asociaciones citadas en el hotel Grand Resort Lagonissi de Atenas.
La juventud de Ceferin (48 años) parece adelantar a la veteranía de Van Praag (68) en las horas previas a la elección del séptimo presidente de la UEFA, una vez consumada la retirada del presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, quien desde la suspensión de Platini ha ejercido como presidente.
En calidad de vicepresidente primero, Villar ha sido la cabeza visible de la UEFA desde que hace trece meses la FIFA dictó una primera suspensión temporal sobre Platini, que el TAS redujo definitivamente a seis años, sin evitar con ello el frenazo a su carrera.
La resolución del TAS y el salto que a finales de febrero dio a la presidencia de la FIFA el suizo Gianni Infantino, mano derecha y secretario general de Platini desde 2009, obligaron a la UEFA a terminar con la interinidad del último año, en el que ha tenido que organizar con Francia la primera Eurocopa de 24 selecciones.
Para normalizarse, su Comité Ejecutivo nombró primero al griego Theodore Theodoridis como secretario general y después optó por cerrar la era Platini y elegir otro presidente.
La carrera por el despacho presidencial de Nyon fue cosa de tres hasta hace una semana, cuando Villar confirmó algo que se rumoreaba desde hacía tiempo y retiró su candidatura. Su argumento fue que muchos representantes del fútbol español le han pedido que continúe al frente de una federación que preside desde 1988.
A menos de 24 horas de la votación, en la que hace falta mayoría absoluta en la primera ronda y simple en la segunda, el esloveno Ceferin parece aventajar al holandés, pese a los 16 años de carrera en el arbitraje de éste, su experiencia como presidente del Ajax y también como presidente de la Federación de Holanda desde 2008.
El fútbol anglosajón prefiere a Van Praag, respaldado también por Bélgica e Islandia, entre otros, pero Ceferin, presidente del fútbol esloveno desde 2011, irrumpió con mucha fuerza en escena y con Infantino entre bambalinas.
El apoyo inicial de trece países, que se encargó de anunciar su homólogo en Rusia, Vitali Mutko, con el de federaciones del Este, asociaciones pequeñas y el reciente de Portugal le sitúan en un papel de favorito que él no deja de rechazar.
Lo que nadie puede descartar es que Ceferin y Van Praag acerquen posturas antes de depositar los votos, algo que el holandés ya hizo en las penúltimas elecciones a la presidencia de la FIFA, en las que, respaldado entre otros por el fallecido Johan Cruyff, retiró su candidatura y apoyó al príncipe jordano Ali Bin Al Hussein, que fue el único rival de Joseph Blatter en aquellos comicios, los últimos que ganó el suizo antes de ser inhabilitado.