Alberto Santamaría, Fermín Rodríguez, Manolo Montalt, Rubén Uría, Josep Lizondo, Vicent Molins, Vicente Bau, Josep Bosch y Nacho Cotino muestran su visión sobre el encuentro de Copa
VALÈNCIA. El Valencia CF logró el pase para las semifinales de la Copa del Rey tras imponerse en la tanda de penalti por 2-3 donde la figura de Jaume fue clave para conseguir la continuidad en el torneo copero.
Los colaboradores de Plaza Deportiva muestran su visión sobre el Alavés 2-1 Valencia CF:
ALBERTO SANTAMARÍA
No me gustó el Valencia. En ningún momento. Abelardo supo leer el partido mejor que Marcelino y siempre se jugó a aquello que le convenía al Deportivo Alavés. Pese a ello, sólo dos errores -otros dos horrores- defensivos en sendos centros laterales permitieron al conjunto vitoriano llegar hasta la tanda de los penaltis. Allí ya era un mera cuestión de suerte y de acierto. Y ambas cayeron del lado blanquinegro. Jaume se convirtió en el héroe de una eliminatoria de la que nadie se acordará si el próximo 21 de abril, el combinado de Mestalla disputa una nueva final de la Copa. Pero antes, esperaremos las semis. Y puestos a pedir, para mí, el Sevilla.
RUBÉN URÍA
24 de Enero. San Jaume. El ValenciaCF semifinales de Copa. A dos partidos de una final. Ante un gran Alavés el VCF jugó con fuego pero no se quemó gracias al Gato de Almenara. El juego del Valencia no fue el mejor ni el más adecuado, pero el objetivo era pasar Y el equipo pasó. Es el premio al trabajo brutal de Marcelino, que recibió un cadáver y ha devuelto un equipo. Sin presión en semifinales, Mestalla tiene licencia para soñar. Otros lo verán por televisión, pero el VCF esta entre los cuatro mejores De esta Copa. Hace dos años estaba intubado y en fase terminal. Hoy acaricia un final.
JOSEP LIZONDO
Yo soy de los que no tiene claro que al Valencia le venga bien la Copa. Ahora 180 minutos más (hasta el Leganés te exigirá) con la cuesta de enero comiéndote. Porque este equipo está tieso, se ha caído, ha perdido el flow y hasta el azúcar. Seguramente la primera factura se pagará el sábado. Pero oye, enero es mes de curva descendente, si sales vivo de esta hasta puedes hacer historia. Pero mira, no se me va esa cosa de que igual es demasiada carga para un equipo tan verde/justito. Què no siga res.
VICENT MOLINS
Llegados a este momento, con el gusto de entrar en unas semis, es tiempo de plantearlo: o seguimos viviendo de rentas o afrontamos el problema que tiene este equipo. Sin el once ideal, con el equipo repleto de boquetes, de jugadores fuera de posición y con la defensa limitada, ya no son síntomas, sino un reflejo. El equipo lleva semanas sufriendo y hasta rehacerse será necesario apretar los dientes. Qué gusto tener que recomponerse estando en semis.
VICENTE BAU
EL DE CASA
Mérito enorme de Jaume en los lanzamientos desde el punto de penalti. Solo él fue capaz de dejar en fuera de juego a un Deportivo Alavés que en el computo de los dos partidos sí se mostró superior al Valencia. Es cierto que pasar a semifinales de Copa te produce una alegría tremenda pero no es menos cierto que el bajón de juego que está experimentando el equipo de Marcelino no invita precisamente a ser muy optimista de cara al futuro. Pasó a semifinales el mejor equipo de los dos pero sin embargo el Deportivo Alavés siempre dió la cara ante los de Marcelino. Es una alegría acompañada de una duda. Alegría por estar en semis y la duda por ver como está bajando su rendimiento el Valencia de forma indisimulada.
JOSEP BOSCH
Patiment, patiment i més patiment.
Classificar-se per a les semifinals de la copa no és una cosa que passe tots els dies i cal celebrar el estar a tres partits de guanyar un títol. Dit açò, no podem obviar que als de Marcelino cada vegada els costa més fer-se amb els partits, sembla que els técnics rivals li han pillat la matrícula al València.
Seixanta-nou minuts ha tardat el València en fer una jugada meritòria i això és algo que no es pot permetre un equip que aspira a estar entre els grans.
Ara toca analitzar les errades, recuperar als jugadors i preparar-se per a unes setmanes intenses de futbol i emocions.
MANOLO MONTALT
Porque se jugó el partido que el Alavés quiso. La parte más importante te la da la aparición heróica y estelar de Jaume Doménech. Dos penaltis parados y alguna parada de mérito durante los 120 minutos les dan al “Gat d’Almenara” un pasaporte para el Olimpo del valencianismo en esta temporada. A ello se le suma el estado de forma de Santi Mina que tiró del carro cuando peor pintaban las cosas. El gallego se puso desde este verano las pilas y se ha convertido en un delantero fiable y rentable. Además hay una evidencia, él y Rodrigo son -a día de hoy- los dos mejores delanteros del equipo. La parte negativa? Este equipo está bastante lejos de su mejor versión. Y ya van demasiadas semanas...
FERMÍN RODRÍGUEZ
Jugar con fuego y no arder
El Valencia se metió en las semifinales de la Copa y eso al final es lo que importa, que sigue alimentando el sueño en una competición que en 1999 inició un ciclo maravilloso.
Pero el fútbol, sabio él, puede acabar penalizando esos peligrosos tics de los que hablábamos hace unas semanas que, de forma casi rutinaria, hacen que el equipo fuera de casa se desconecte. Algo que no ocurría en los primeros meses. En Mendizorroza, a pesar de la ida y la advertencia de Marcelino, volvió a ocurrir. Se jugó con fuego. Santi Mina, con su gol vital, provocó el mal menor, que el encuentro acabara en la prórroga, cuando se merecía otra cosa. Después Jaume y esos penaltis que casi provocan una epidemia de ataques de corazón. Fuego. Sufrimiento. Y a semis. Sin arder. A seguir soñando pero ojo, que el fútbol acaba siendo justo.