VALÈNCIA. El Valencia no pasó del empate en su visita al estadio de San Mamés y cosechó un resultado que no le sirve para sus aspiraciones y sigue en la parte baja de la clasificación.
Los colaboradores de Plazadeportiva.com muestran su visión sobre el Athletic 0-0 Valencia CF:
ALBERTO SANTAMARÍA
Yo no estoy preocupado, la victoria acabará llegando. Es una simple cuestión estadística. El triunfo del Valencia está hoy más cerca que ayer. Lo que no sabemos es cuándo lo hará. Y lo peor de todo es que, quizá, cuando gritemos 'aleluya', será tarde. La Liga no espera a nadie y las distancia con la zona Champions comienzan a ser considerable. El equipo sigue siendo plano, comete los mismos errores partido tras partido y nada cambia. Nada. Ayer Marcelino renunció al desequilibrio en el centro del campo apostando por cuatro mediocentros y el conjunto blanquinegro sólo fue capaz de tirar a puerta en el tramo final del encuentro. Sin embargo, para el técnico los suyos merecieron ganar. Esto sí me preocupa. Mucho. O aparece la autocrítica ya -Gayà sí la expresó, menos mal- o nos tocará tirar la temporada a la basura. Y en el año del Centenario no creo que sea lo que mejor nos venga. ¡Cuidado!
JOSEP LIZONDO
A mí me pasa que veo los partidos, sólo, eso sí, no aguanto gente taladrando ni gritándole a la tele, y luego salgo al mundo digital y no he visto nada de lo se dice. Es encomiable la capacidad de aguante que tiene este equipo. Esa actitud y sacrificio no se le puede negar. Y eso que el miedo y la inseguridad se notan ya en el campo. Hoy especialmente en casi todo el encuentro. Lo paradójico es que cuando deciden dar el paso adelante, en esa fracción de segundo, se genera peligro y hasta ocasiones. Es momento de don Santiago Mina Lorenzo y dejarse de filigraneros de alto copete e incapaces de interpretar lo más básico. Mina será nuestro Montjuic.
RUBÉN URÍA
Infumable
Jugadores asustados y bloqueados por la situación. Rodrigo y Parejo a años luz del pasado curso.
VICENT MOLINS
Más cerca del hito de ser el equipo que más ha empatado en una misma temporada. No parece tan casual. El equipo plantea los partidos, se plantea a sí mismo, desde la inseguridad del que no se puede permitir tropezar. La ventaja, resguardados e impermeables. La desventaja, ¿cómo ganar si no es por accidente? Si a ello le sumas una parte creativa que parece no haber jugado nunca junta, y a una incapacidad atroz para jugar a otra cosa que a lo que todo el mundo prevé, ahí un Valencia insólito: tan cerca del desastre, tan próximo de ir para arriba, tan en ninguna parte.
PACO GISBERT
No es suficiente castigo tener que soportar la banda sonora de Santiago Segurola en la retransmisión televisiva? No es suficiente castigo perderse la imprescindible y reparadora siesta del sábado por la tarde? No es suficiente castigo ver a 22 futbolistas corriendo sin sentido durante casi dos horas? No, el València siempre ofrece más. Siempre da la emoción de pensar que puede perder contra este Athletic de broma, cómo empató contra el Manchester de broma. Siempre da la sensación de que no aprovechará la debilidad del rival y ni siquiera tendrá un maldito VAR que le eche una mano. El València sigue sin perder, sigue sin ganar, y sigue dándome la sensación de que me he perdido una siesta que no recuperaré jamás.
VICENTE BAU
De nuevo un tristón Valencia no logró - ni intentó casi en ningún momento - batir la meta de un Athlétic desdibujado y poca cosa sobre el terreno de juego. El Valencia entero da pena y el partido de su cerebro, Parejo, fue de nuevo lamentable. Mal duelo de dos históricos en horas muy bajas y el típico y lamentable empate de un Valencia que da la impresión que no sabe ganar ni disputar ningún duelo. Otro disgusto.
JOSEP BOSCH
Ahir presenciarem el típic partit que si eres un aficionat neutral aprofites eixe temps per allargar la sobretaula, pegar una cabotadeta al sofa o per anar de compres. La primera part ha sigut una constant successió de faltes on les millors ocasions de marcar han sigut del València, en les botes de Batshuayi i Kondogbia. La segona part ha sigut altra cosa més ritme, major emoció, però poca polvora en atac. Al final altre empat i continuem en el dia de la marmota.