VALÈNCIA. Los colaboradores de Plazadeportiva.com muestran su visión sobre el Granada CF - Valencia CF:
JOSÉ MARÍA PERIS
Si les portes de la barrera no hagueren permés el segon gol del Granada, encara es tindria un argument emocional buscant un objectiu esportiu. I encara que l'efectivitat ha sigut màxima, cert és que res just podria dir-se que és l'empat. Però crec que a cap valencianista li importa guanyar alguna vegada sense mereixer-ho. L'equip no acaba de millorar, amb una plantilla trista que, a vegades, sembla estar més pendent de cremar les naus de la propietat que d'altra cosa. Poca ànima encara, necessària per seguir buscant la plaça europea. Una nit d'estiu que hem destinat al patiment de sempre i que no ha acabat amb un somriure. Era massa bonic que tornara el rocanrol i el Valencia CF alhora. Seguirem el viatge, encara que siga sense cap destí.
SERGIO ARLANDIS
Nos estábamos conformando con tener un equipo medianamente serio en el campo para no volver a aborrecer un partido más postconfinamiento, pero llegó el empate, más que merecido, del Granada y nos volvieron todas las dudas del mundo. A pesar del punto (no sé cuántos penaltis en contra y cuántos goles encajados en los últimos minutos llevamos), no del todo merecido por lo hecho en el partido, no podemos dar la espalda a las muchas miserias que se siguen quedando a la vista: Wass es un jugador muy justito en todo y nos hacen daño en su espalda, Parejo está desdibujado y lo que toca lo estropea, Soler y Guedes casi siempre eligen mal cómo acabar la jugada, Gameiro no tiene gol, la defensa es una chirigota cada vez que cuelgan un balón en su área, Sobrino es (y lo dije desde siempre) un jugador mediocre y por culpa de errores personales de jugadores mediocres (y tienes unos cuantos en nómina) pierdes puntos, opciones, dinero. Este equipo ha perdido en un año su espíritu competitivo y mordedor y no me vale la macarrada de Maxi encarándose a un técnico (por cierto, esto no se sancionó?), hablo de otra garra, de otra agresividad, esa que te hace disputar, con convicción, un balón. De eso, decía, poco queda.
PACO GISBERT
A estas alturas de la temporada, un sábado por la noche, se me ocurren varios centenares de cosas más excitantes que ver al Valencia. Pero ahí hemos estado. Viendo un partido más de este equipo en depresión que solo desea que acabe esta pesadilla. Y ya que hemos elegido la peor idea para pasar el sábado por la noche, seamos positivos. Hemos marcado dos goles, no hemos perdido e incluso ha habido ratos que parecía que el equipo quería ganar. Tampoco esperábamos mucho más.
VICENTE BAU
Curioso partido. Unos jugadores andaban por Granada, algunos o muchos periodistas curiosamente buscando a Lim en Singapur, Guedes se marcó un golazo de esos que nos concede poquísimo y por último una vergonzosa barrera del Valencia dio el empate a un Granada superior. El partido sirvió de excusa para que dejemos de pensar en este triste y aburrido Valencia, pero el pitido final nos vuelve a colocar en esa racha de confusión y tristeza tremenda que se ha apoderado del Valencia. Empatito final que sirve de muy poco. Nuevo fracaso de un tristísimo Valencia. Otro más.