VALÈNCIA. El Valencia perdió su primer partido de la fase de grupos de la Liga de Campeones en Mestalla contra una Juventus de Turín que jugó más de una hora con un hombre menos por la expulsión de Cristiano Ronaldo.
Los colaboradores de Plazadeportiva.com muestran su visión sobre el Valencia CF 0-2 Juventus de Turín:
ALBERTO SANTAMARÍA
Doble bofetada de realidad. Por un lado y por el otro. Así podría resumirse el reencuentro de Mestalla con la Champions. Anoche, el Valencia no estuvo a la altura. Ni de la Juventus ni de la competición. No, al menos ayer. Ni siquiera la valentía del colegiado ante la enésima 'Cristianada' consiguió meter en partido a los blanquinegros. Apenas unos pocos minutos de efervescencia que acabaron con el absurdo penalti de Parejo. Con once sobre el campo, los de Allegri arrasaron y con un hombre menos, el oficio italiano se impuso al corazón local. El balón de las estrellas tan solo ha echado a rodar, queda un mundo, pero los octavos de final requieren más. Mucho más. Por ejemplo, empezar a ganar. Y el domingo, en la Cerámica tampoco será fácil.
MANOLO MONTALT
Poco que decir. Quizá que lo que más preocupa no es ya el 0-2 jugando ante 10 futbolistas, ni la superioridad mezclada con suficiencia de un transatlántico europeo que está ahora mismo a años luz del Valencia. Lo que más me preocupa es que el resultado ante la Juve no es la consecuencia de todo lo anterior, si no más bien de un equipo que lejos de evolucionar, involuciona. Los juventinos desnudaron ayer todas y cada una de las carencias del Valencia CF. El Valencia se miró en el espejo y la imagen que devolvió el reflejo fue una grotesca deformación de lo que un día fue un grupo compacto que consiguió dejar a 16 equipos en la liga por detrás de él. Quizá el Valencia del año pasado también hubiera perdido contra la Juventus, y quizá por más de 0-2. Pero hubiera dado menos impresión de impotencia y de ser un rival plácido para su oponente.
RUBÉN URÍA
Impotencia total. Ni contra 11 Ni contra 10 el VCF fue capaz de competir o inquietar a una Juve muy superior. Marcelino ya sabe que la profundidad del problema ya no es sólo la ansiedad en Liga. La cita le vino muy grande al equipo. No hubo ni rebeldía para intentar meterse en el partido. Decepción enorme.
JOSEP LIZONDO
El partido te lo ha ganado un señor que se llama Alex Sandro que sabe centrar, tanto, que cada vez que mete un balón te crea un Vietnam en el área. ¡Laterales que centran! ¡Qué osadía!
En fin, Serafín. Nada que no esperara. De hecho me hubiera sorprendido cualquier otra cosa. A esta competición has llegado demasiado pronto, demasiado deprisa, y un poco del revés. Te queda un pelín grande. Pero para eso está, para aprender. Y por eso es importante no tomarse a chufla la realidad, cayendo en ensoñaciones y populismos de barra de bar. Porque del pozo del que vienes se sale jugando a esto todos los años, y no uno de cada tres. La Liga es lo que importa, y en la Liga es donde está el peligro.
Otro día, con más calma, hablaremos de Batshuayi, que me hiela la sangre cada vez que le veo vestido de blanquinegro.
Hacer cualquier otra valoración sería hacer sangre (más). Has sido un niño en manos de un matón de patio de instituto, con 5 cursos repitiendo. La Juve con 10, en esos escenarios emocionales donde equipitos como el Valencia se deshacen o naufragan, te ha metido tal meneo, un meneo sordo, que parecía que estabas jugando tú con 9 y ellos con 12.
Madurez falta mucha. Experiencia competitiva, a capazos. Mentalidad ganadora, a raudales. Dejen al Valencia media hora más en el horno.
VICENT MOLINS
Ya no son síntomas, son pruebas. Una involución. La sensación de que ‘sacsar’ la plantilla, introducirle novedades, ha hecho menos competitivo a un grupo que cuando podía, iba, y que cuando no podía resistía atrincherado. Ni frescura ni trinchera. Rígido y previsible, sin ideas y sin picante. Un objetivo delicado al poco de comenzar: recomponerse tras una crisis de expectativas. Entre tanto, Parejo debe parar, Soler debe ocupar su puesto, el entrenador debe encontrar una defensa estable.
VICENTE BAU
No fue inesperado. Un mal Valencia cayó con toda justicia ante un equipo italiano muy superior pese a no contar con el expulsado Ronaldo la mayoría del duelo. Jugó una escuadra compacta y muy seria ante un equipo flojito e indolente. Y claro, ganó con una autoridad terrible la escuadra que fue mejor de principio al fin con once o con diez jugadores dobre el terreno de juego. El Valencia, con este, lleva ya cinco partidos seguidos sin conocer la victoria. Y yo le preguntaría a Marcelino qué es lo que ha hecho durante todo el verano. Damos pena.
JOSEP BOSCH