Un espectáculo dedicado a Jaume Ortí

VALÈNCIA. Un espectáculo dedicado a Jaume Ortí. Así se puede definir el partido que protagonizaron anoche Valencia CF y FC Barcelona. Una fiesta del fútbol en la que aparecieron primero los azulgrana con una primera parte muy inspirada que puso en serios aprietos a los locales que una vez más, supieron sufrir esta temporada hasta encontrar las buenas sensaciones.

El guión del partido fue el esperado. El Valencia CF cedió el control del partido al FC Barcelona y quería encontrar un contragolpe para dar un ‘zarpazo’ a lucha por la liga. Sin embargo, los de Valverde tenía controlado el partido y recuperaban siempre en campo contrario. El Valencia CF que no concedía ocasiones claras, padecía ante la imposibilidad de enlazar una transición rápida que pusiera en aprietos a Ter Stegen.

En el pleno choque de trenes, la ocasión más clara se generó debido a la polémica. Leo Messi que estaba acertado, trazó una pared con Paulinho y lanzó un disparo poco peligroso al centro de la portería. Un tiro que fue Neto quién se empeñó en convertirlo gol. El guardameta se hizo un lío al blocar el esférico, le pasó por debajo de las piernas tras botar en el césped y traspasó la línea de gol. Lo vio Messi y los jugadores del FC Barcelona y probablemente un sector importante de Mestalla porque el cuero traspasó claramente. Sin embargo, Iglesias Villanueva y su linier no lo apreciaron y el marcador siguió 0-0. El Barcelona se olvidó del partido por un instante y desatado por las protestas hacia el colectivo arbitral, el Valencia CF aprovechaba para deshacerse de la asfixia del líder y efectuar un contragolpe que Zaza envió fuera con un disparo cruzado.

Ya en la segunda parte, el partido cambió. El Valencia CF empezó a ser el equipo que le ha llevado a ser segundo tras trece partidos de liga. Los de Marcelino comenzaban a conectar contraataques y la velocidad de Guedes ya era el ‘arma’ que todo el valencianismo esperaba. El portugués fue el primero en poder marcar con una gran acción individual. El ‘7’ valencianista encaraba a Umtiti y tras dribarlo se topó con un Ter Stegen providencial. No obstante, el intercambio de golpes entre ambos equipos ya existía y los goles no tardaron en llegar. Otra vez por la banda izquierda, Gayà llegaba hasta línea de fondo y servía un centro al primer palo a Rodrigo para que hiciera el 0-1.

El delantero quiso dar un sentimiento especial a la celebración y se puso la mítica peluca naranja que honraba al recién fallecido Jaume Ortí que recibió una ovación histórica por parte de Mestalla. Con el 1-0, el Valencia CF siguió valiente, yendo a por el Barcelona pero no estuvo fino a la hora de dar el último pase. El Barcelona no perdió la fe y se encomendó a Leo Messi que volvió a aparecer para dejar la liga a cuatro puntos. El argentino buscó a su socio favorito, Jordi Alba y le trazó un centro preciso para que el lateral dejara ‘helado’ Mestalla con un remate acrobático. El partido ya estaba ‘loco’ y el temor afloraba en las dos áreas. Zaza y Pereira pudieron poner la liga en un pañuelo pero no acertaron y dejan la lucha por el título ‘muy viva’.