Un punto que deja un sabor amargo

VALÈNCIA. Un punto que deja un sabor amargo. El Valencia no pasó del empate en Mestalla ante la Real Sociedad en un encuentro en el que se notó el cansancio en el equipo de Marcelino, al límite tras los últimos compromisos, repletos de fatiga y emociones. El encuentro lejos de ser brillante, otorga las sensaciones de que siendo compacto, el Valencia cuenta con opciones de acabar en puestos europeos la próxima temporada.

El Valencia ha recuperado autoestima, pero empieza a acusar la carga de partidos en un mes frenético. Ahora, llega una nueva vía de esperanza para salvar la temporada y la economía de la entidad con la Europa League. El próximo jueves el Valencia tiene una cita importante a domicilio ante el Celtic donde espera refrendar los últimos buenos resultados y acercar la clasificación para los octavos de final del torneo europeo.

Respecto al encuentro, el primer tiempo del partido fue soporífero. Las ocasiones brillaron por su ausencia y ambos equipos reflejaron la igualada del choque con múltiples imprecisiones. Lo más destacado en el Valencia fueron las primeras sensaciones que desprendía el debut de Roncaglia, muy sobrio en el eje de la zaga junto a Garay. Con el 0-0, se llegó al descanso.

Ya en la segunda parte, el Valencia comenzó mejor que su rival, pero sin llegar con peligro a la meta defendida por Rulli. Los de Marcelino aumentaron la presión y robaban cada vez más cerca del área de la Real Sociedad. A la hora de partido, otra vez Kondogbia probó fortuna desde lejos. El resultado fue el mismo: balón a las manos de Rulli.

Aún así, con el paso de los minutos, los de Marcelino incrementaron su presencia en campo rival ante una Real Sociedad imprecisa. Gameiro tuvo la más clara para su equipo, pero su cabezazo se fue arriba tras una mala salida de Rulli. De hecho, Roncaglia pudo ser el héroe posteriormente en otro córner en una nueva mala salida del portero de la Real Sociedad. 

El Valencia no paró de intentarlo en el segundo acto, apretó el acelerador y lo que faltó fue el gol. Todo el peligro llegó por la banda izquierda. Cheryshev puso un gran centro y el ‘testarazo’ de Rodrigo rozó el palo. A falta de poco más de un cuarto de hora, Guedes regresó a los terrenos de juego. Mestalla extrañó al luso tras varias semanas lesionado y espera que ofrezca un salto de calidad a partir del jueves contra el Celtic. Finalmente, el marcador no se movió y el Valencia sumó un punto que le dejó sin asaltar la sexta plaza.